¡Que orgullo de ser cubana! Mi Isla nuevamente da una lección al mundo. Otra de tantas que llevan en sí esfuerzo y dedicación por el más preciado de los derechos, la vida.
Tan solo han transcurrido 24 horas del inicio de la segunda fase de la etapa de recuperación, mientras corre el día número 115 de esta lucha cubana a brazo partido por la salud; y le seguimos ganando a la Covid-19 con sólo 2 mil 361 positivos.
No ha sido fácil, pero en este escenario mundial plagado de contagios y muertes, que el pequeño caimán bloqueado tenga estas cifras, respecto a los más de 10 millones 665 mil a escala global, es la hazaña resultante de la unión y fuerza inquebrantable de nuestro pueblo y de la Revolución.
Lo dijo Díaz-Canel, cierto. Pero es una verdad que se expresa en las horas indefinidas que han permanecido médicos, enfermeras, demás personal del sector sanitario y de servicio de Cuba, voluntarios, y tantos otros, que conforman una lista inmensa de protagonistas.
El actuar oportuno, previsor, del gobierno y el ministerio de salud pública, incluso dos meses antes de la detección del primer caso aquí; la toma de decisiones y establecimiento de medidas en todos los sectores de la vida económica y social, nos han permitido superar los momentos más difíciles, y convocan a continuar siendo responsables y disciplinados para conquistar la victoria definitiva en esta guerra epidemiológica.
La batalla contra la #COVID19 precisa de la participación de todos. La autorresponsabilidad, la conciencia ciudadana y nuestra capacidad de cooperar son esenciales. No podemos descuidar ninguna de las medidas orientadas para evitar la transmisión de la enfermedad. #CubaPorLaSalud pic.twitter.com/XQzoKXSCHl
— José Angel Portal Miranda (@japortalmiranda) May 13, 2020
Toda #Cuba amanece hoy en fase recuperativa de la #COVID19.
Semanas de esfuerzos conjuntos, disciplina y dedicación de nuestros profesionales de la salud nos permiten avanzar hacia una nueva normalidad.
La responsabilidad individual y colectiva serán garantías de la victoria. pic.twitter.com/RZkpQFPpma
— Bruno Rodríguez P (@BrunoRguezP) July 3, 2020
En medio de carencias, del arrecio del absurdo y genocida bloqueo, de las limitaciones impuestas por la propia pandemia, los hechos son contundentes; la realidad de lo que somos capaces de hacer como sociedad justa, con el concurso de todas las manos, ante cualquier amenaza, supera las expectativas.
Lejos de aquel cuadro que los detractores dibujaban con miles y miles de casos, hospitales colapsados, calles llenas de cadáveres y personas deshauciadas; mi país tercer mundista se erige entre los de mejor manejo de la enfermedad, con sólo 86 fallecidos y la recuperación del 94.3 por ciento de los confirmados.
La comparación del índice de letalidad de 3.64 por ciento, respecto al 4.69 de América convertida en epicentro; y en consecuencia, la ubicación en el lugar 20 de esta región, y en el 101, entre los 185 países que reportan presencia del virus, da la medida de nuestro logro.
Pesquisas activas con la participación ciudadana, rastreo a fondo de personas con síntomas y de los contactos, disposición de centros de aislamiento, preparación del personal asistencial y de los hospitales para recibir y atender los casos, despliegue de la Atención Primaria de Salud para la vigilancia y control de infecciones respiratorias agudas, resaltan a la vista como éxitos del sistema médico nacional gratuito y al servicio del pueblo.
Por consiguiente, el incremento de los análisis de PCR en tiempo real, con más de 178 mil realizados, el empleo de 139 mil 154 kits rápidos, los estudios poblacionales, que en su conjunto han favorecido el examen de 28.3 por cada mil cubanos hasta este dos de julio, según datos ofrecidos por el ministro de salud Jose Ángel Portal Miranda.
La ciencia al servicio del pueblo, capacidades científicas, tecnológicas y profesionales en función de la mayoría, la búsqueda permanente de opciones de tratamiento, novedades farmacológicas, pesquisadores virtuales, cálculos y curvas de comportamiento; avalancha informativa que actualiza, orienta, sugiere, acompaña.
Gestos altruistas que trascienden los límites del aislamiento, para llevar comidas, medicinas, útiles de aseo; solidaridad extendida de una provincia a otra, y desde la ínsula caribeña hasta hermanas naciones que lo requieran; valores humanos puestos a prueba y acrecentados.
#Fidel I 30 de junio 1994: «…les digo que sentimos en ustedes una confianza ilimitada, una confianza infinita, y que cuando se escriba la historia de estos años heroicos y gloriosos, entre las primeras filas estarán los médicos y las enfermeras de la familia.»#CubaPorLaVida 🇨🇺 pic.twitter.com/flwLlbEPEY
— José Angel Portal Miranda (@japortalmiranda) June 30, 2020
El reto que la pandemia impone es arduo, pero el proyecto social que seguimos construyendo desde la ética y principios de la obra revolucionaria, desde la concatenación de fuerzas, y el liderazgo gubernamental, señalan que es este el camino correcto.
Al desafío de la Covid-19 Cuba responde y se levanta, prosigue la contienda con la mira de defender la vida y la obra de la Revolución, con la meta única de seguir salvando y ofecer seguridad a su pueblo.