La Habana.– En momentos en que la región de las Américas aporta más del cincuenta por ciento de los casos confirmados a la COVID-19 en el mundo, Cuba cerraba la jornada del domingo con solo dos personas reportadas con la enfermedad, uno de ellos con fuente de infección en el extranjero, además de retomar la tendencia favorable a conceder más altas médicas que ingresos hospitalarios.
Encabezado por el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel Bermúdez y el Primer Ministro, Manuel Marrero Cruz, el Grupo Temporal de Trabajo del gobierno evaluó la situación epidemiológica en el país, y la marcha de las medidas previstas para las diferentes fases de la etapa de recuperación, en las que se encuentran La Habana, y las provincias de Pinar del Rio y Artemisa.
El titular de salud, José Ángel Portal Miranda, se refirió a los dos eventos abiertos en la capital, uno en el Consejo Popular de Los Sitios, en Centro Habana y el otro en Pilar-Atarés, en el Cerro.
El evento del municipio de El Cerro en la localidad de San Joaquín, ha confirmado un total de 25 casos positivos a la enfermedad hasta el momento.
La vice gobernadora, Yanet Hernández Pérez, habló de las medidas de reforzamiento en los municipios más complejos de la provincia, un territorio donde se concentra actualmente el mayor número de casos activos a la COVID-19 en el país con 65.
En estas localidades se desarrollan medidas de aislamiento de los núcleos familiares, y se mantiene la vigilancia a los grupos más vulnerables, a partir de la estrategia de estratificación de riesgos y la labor diferenciada por manzanas.
En un fin de semana, donde oficialmente se iniciaron las actividades del verano en Cuba, La Habana reportó una gran afluencia de personas a sus playas, lo que demanda un gran esfuerzo organizativo, mayor rigor en la exigencia de la disciplina y las medidas de reforzamiento del transporte público.
El presidente Miguel Díaz-Canel llamó la atención sobre la necesidad de que las personas acudan a las playas, para lo cual deben crearse todas las condiciones y también respetar el distanciamiento físico.
Tanto Pinar del Rio como Artemisa transitan con normalidad por la fase dos de la etapa de recuperación. La más occidental de las provincias cubanas se mantiene con 57 días sin casos confirmados a la COVID-19, mientras los artemiseños aseguran las labores para el reinicio del venidero curso escolar en todas sus instalaciones.
Mientras la región de las Américas continúa siendo el epicentro de la pandemia en el planeta, Cuba muestra control de la enfermedad y más del 93 por ciento del total de los casos confirmados a la COVID-19 ya han sido recuperados, lo que demuestra la efectividad de las medidas de prevención y control del gobierno, y la capacidad del país para retornar gradualmente hacia la nueva normalidad.