Fin del bloqueo a Cuba, reclamo creciente de los cubanos pero no obstáculo para continuar adelante.

Foto: Prensa Latina

El bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos contra Cuba desde hace mas de 60 años, es el más largo en la historia de la humanidad y la expresión más elevada de una política cruel e inhumana, diseñada para provocar hambre, enfermedades y desesperación en la población cubana.

El Gobierno de Estados Unidos lejos de poner fin al bloqueo ha mantenido en vigor las leyes, disposiciones y prácticas que le sirven de sustento desde su implantación, que   mediante la coerción,  la fuerza y violando las normas del derecho internacional privan al pueblo cubano de defender su soberanía y el derecho a la autodeterminación.

Aunque no han logrado su propósito final, si han causado considerables daños a la economía y al pueblo cubano, y ello se ve reflejado en los innumerables perjuicios  a diferentes sectores de la sociedad, en recursos, materiales, piezas, alimentos y otros que hoy nos imposibilitan desarrollarnos y bridar servicios de buena calidad.

El bloqueo económico a Cuba inició  a escasos meses del triunfo de la Revolución cuando recién comenzaban a aplicarse las medidas nacionalistas y de defensa de los intereses populares con la disposición de construir nuestro   propio camino.

Hoy más que nunca esa fiebre y hambre por doblegarnos sigue en los poderosos del imperio, quienes no admiten que a solo 90 millas tengamos una revolución del pueblo y para el pueblo, con un legado que va desde los mambises hasta nuestros principales líderes políticos, donde se destaca la figura del invicto Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz.

Los cubanos y cubanas  sabremos defender las  conquistas  alcanzadas  con el  Primero de enero victorioso del año 1959 y hoy VAMOS POR MÁS, y a pesar  del férreo bloqueo impuesto por  el gran imperio del Norte, continuamos firmes y decididos trabajando por un futuro mejor,  próspero y  sostenible.