Manzanillo. Enero 13.- Por un acto de fe tan sublime como recibir con tus propias manos el llanto enternecedor de una nueva vida, cientos de hombres y mujeres de esta ciudad costera duplican sus esmeros en una de las instituciones sanitarias que se erigen como baluarte de la conquista médica cubana al servicio de la salud.
El recien iniciado 2021 imprime un nuevo ritmo al Hospital Ginecobstétrico Fe del Valle Ramos de Manzanillo, donde más de 850 profesionales retoman las riendas del milagroso ejercicio del que germinan esperanzas y alegrías.
“El hospital comienza un año con los aseguramientos médicos suficientes para prestar un servicio de calidad, a la altura de la población cubana; y nos hemos propuesto bajar la tasa de mortalidad infantil por debajo de tres, aunque el país está pidiendo cuatro, porque nuestro propósito es revertir los resultados que en un momento fueron negativos”, afirma el doctor Olegario Leyva Escalona, especialista de primer grado en Ginecobstetricia, y director de la unidad médica.
“El compromiso de elevar la calidad asistencial, y que eso se traduzca en resultados estadísticos”, se asume desde pasos concretos materializados hoy en la remodelación estructural capital de su salón de partos y del servicio de Neonatología, puntales de la actividad médica.
“Un salón de partos recién inaugurado con capacidad para 29 camas que permitirá atender a las pacientes de los siete municipios de la región del Guacanayabo, donde tenemos una población de cerca de 90 mil mujeres; y una sala de neonatología con 8 cubículos; ambos con personal calificado para desempeñarnos, y tener un 2021 con un programa materno infantil satisfactorio, acorde a lo que espera el Ministerio de Salud Pública”.
Las dos obras constructivas, con montos económicos ascendentes a los 195 mil CUC entre ambas, asevera, “fortalecen al 100 por ciento la asistencia, porque el aseguramiento de cada una de las funciones estructurales y de equipamiento contribuye al éxito de la medicina que presta nuestro país, a la altura del mundo desarrollado”.
Pese a las vicisitudes, Cuba realiza ingentes esfuerzos para disponer lo necesario “y que esté garantizado en el momento oportuno, pues la eficiencia y resultados de la medicina dependen en parte de muchos recursos y equipamientos que hoy contamos, gracias al trabajo de la provincia y el país”.
El capital humano de 72 médicos, alrededor de 400 enfermeras y personal de apoyo, su profesionalidad y sensibilidad ante féminas, madres y bebés es la principal dotación de la instalación, donde “equitativamente se mezclan juventud y experiencia para que los casos sean atendidos con la calidad que amerita cada una de las pacientes”.
En esa confluencia de jóvenes especialistas que no superan los 35 años, guiados por profesores con más de dos décadas en la prestación de servicios, “descansa la asistencia médica”; que llega igualmente a otras fronteras, pues sus representantes están desplegados en más de 10 países del mundo, algunos en la línea roja de la lucha contra la COVID-19 que integran la Brigada Henry Reeve, como un grupo de enfermeras y un doctor anestesista que cumple la tarea en Panamá.
También aquí el nuevo coronavirus impone la práctica de estrategias a este colectivo en su noble empeño por la salud de embarazadas y neonatos, acorde a los protocolos del sistema asistencial cubano, y se tiene bien definido cómo y dónde actuar en caso de la presencia de la enfermedad en alguna de sus pacientes, como respaldo de protección tanto para la madre, su hijo, como para el equipo médico y el resto de las hospitalizadas.
“Contamos con recursos suficientes para enfrentar cualquier manifestación, siempre teniendo en cuenta que la mejor forma de enfrentarse a esa enfermedad es evitándola”, en tal sentido, Leyva Escalona plantea que han “asumido con responsabilidad la vigilancia preventiva, y el hospital tiene restringido el sistema de visitas, pero garantiza que todo cuanto llegue de la casa a las hospitalizadas se le entregue con prontitud y seguridad”.
En aras de incrementar la eficacia de sus prestaciones, se enfoca el actuar en virtud del crecimiento científico y la capacitación profesional del colectivo, detalla el también profesor instructor, a través de “un sistema con cursos de interrelación realizados en Bayamo y Holguín, de preparación en equipamientos médicos de la terapia intensiva al personal de enfermería del salón y el proyecto de superación de la Facultad de ciencias médicas Celia Sánchez Manduley que prevé el incremento de las categorías docentes de nuestros profesionales y la acreditación por la Universidad al hospital, donde se asume la docencia del cuarto y sexto año de la carrera de Medicina, y de un grupo de residentes en formación como especialistas en Ginecobstetricia y Neonatología”.
Alcanzar la meta máxima de proteger a las maternas y recién nacidos, comentó, parte además del apoyo de la familia y la acción eficiente de la Atención Primaria de Salud, “vital en tanto aseguran la llegada al momento del parto; y con la cual tenemos una interrelación bien establecida, con un puesto de mando donde los miércoles discutimos la morbilidad y en una mesa técnica se propone cada detalle de atención y los pronósticos de nacimientos en el momento; procedimiento que se aplica hace alrededor de cinco meses, y que a partir de las estrategias provinciales provee la logística y la programación administrativa para recibir con éxito a cada uno de los bebés que nace en nuestra maternidad”.
A sus 31 años, Olegario Leyva Escalona cumple el desafío de guiar a quienes son primeros en ver el rostro de la vida, y aunque considera que “llevar las riendas es un reto”, afirma con certeza que cuenta con el apoyo de especialistas de amplia experiencia, tanto en el municipio como a nivel provincial, y como joven permanece en un “aprender constante”, que se afianza con cada madre e hijo salvados en los salones del Fe del Valle manzanillero.
Todo eso esta muy bueno y hay un exelente equipo d emedicos , que atienden as embarazadas con amor y respeto , hace unos dias estaba por alli y me encontre con que en las 3 sala que fui estaba sucias , el frente igual la sala de espera peor y ni contar con de los baños , las misma embarazadas tienen que descargarlo , eso mancha todo lo bueno que hace este hospital , no estamos ajenos que no hay muchos recurso , pero siempre se puede hacer algo tomar estrategias, gracias
Entre las proyecciones de la institución hospitalaria en el actual año 2021, comentó su director, se incluye la restauración del sistema o red hidrosanitaria del edificio de hospitalizadas para erradicar situaciones que en la actualidad se presentan en este sentido. Pero compete a todos igualmente, tanto pacientes como familiares y al personal sanitario y de servicio que allí labora, preservar la higiene y el cuidado de esos recursos y la higiene y limpieza, porque todos conocemos que en gran medida depende de la irresponsabilidad de algunos que estos medios pierdan su vida útil, por actitudes negligentes como hechar los restos de comida en la tasa sanitaria. Además es sabido el compromiso del sistema sanitario cubano con devolver la vitalidad a cada servicio, como refiere el especialista, y como se hizo con el salón de partos, la sala de Neonatología, los laboratorios, en este centro; y fuera de él sólo citemos las dos Unidades de Cuidados Intensivos de los hospitales Pediátrico Hermanos Cordové y Clínico Quirúrgico Celia Sánchez Manduley, también de Manzanillo.
No me refiero a la higiene en general sino a que como es posible que una asistente de servicio , pase por una sala bote los papeles y no descarge las tasas ni la seque la mojason , , estan un poco mejor por los familiares si no estaria peror