Los educadores manzanilleros responden al llamado de producir alimentos

Manzanillo. Mayo 13.- Los educadores manzanilleros no sólo han respondido al llamado del cumplimiento del aislamiento social para evitar el contagio y la propagación del nuevo coronavirus Sars-Cov-2, sino que también han hecho suya la convocatoria de producir alimentos en esta etapa, para poder enriquecer en el futuro las propuestas alimenticias que se le brindan a niños y profesores del territorio.

En 14 centros educativos que tienen las condiciones y terrenos para esta labor se trabaja durante este tiempo en la siembra de yuca, maíz, boniato, entre otros alimentos. El máster en ciencias pedagógicas Yunior Heredia Tamayo, director del sector de la Educación en Manzanillo brindó para nuestra redacción algunos detalles.

“En Educación también tenemos tierras significativas para producir alimentos pues contamos con más de 60 hectáreas (ha) de tierras distribuidas en varios centros,  y de ellas más de 53 hasta el cierre de abril han sido preparadas para la siembra”.

M. Sc. Yunior Heredia Tamayo, director de educación en Manzanillo // Foto Eliexer Pelaez Pacheco

El directivo agregó que en estas áreas se ha logrado  el cultivo de viandas en unas 26 hectáreas. “Ya hemos cosechado maíz, yuca, boniato, así como plátanos burro y fruta. Tenemos involucrados en esta tarea varios centros pero lo más significativos son, el Instituto Politécnico Agropecuario  (IPA) Enrique  Vilar, la escuela José Antonio Echevarría, la especial  Mario Carbó, la de conducta Camilo Cienfuegos, en La Demajagua, el centro mixto Emilio Lastre, y el campamento de pioneros Qué

“En el IPA Enrique Vilar, por las propias  características de ser un centro formador de técnicos medios en temas de la agricultura, tenemos allí también una producción significativa de conejos, ovejos y bueyes, que nos permite también brindar nuestro aporte en esta contingencia”, señaló Yunior.

Pero no todo se queda en las áreas propias de la zona urbana de  Manzanillo, pues en la parte rural como en Cayo Espino se han logrado otros éxitos en  esta labor. “En la escuela primaria José Antonio Echevarría de esa zona ya estamos recogiendo frutos de lo cosechado en las tres hectáreas que allí tenemos. Desde este centro ya hicimos una entrega de  aproximadamente 10 quintales de boniato al hogar de niños sin amparo familiar de nuestro municipio y tres quintales más de plátano burro”, señaló Heredia Tamayo.

Pero no todo queda en estos centros también los círculos infantiles se beneficiaron con el aporte de lo que se sembró en este sector. “De la escuela especial Camilo Cienfuegos hicimos entrega además de plátanos burro y fruta para los cuatro círculos infantiles que tenemos laborando en este tiempo de contingencia epidemiológica”, dijo el director.

“Destacar también que el colectivo del campamento de pioneros Qué siempre brille el sol tiene un trabajo sistemático en esta producción. Todas sus tierras están rotuladas y se cultivaron más de la mitad”, expresó el profesor.

Labores de siembra de alimentos en el campamento de pioneros Qué siempre brille el sol // Foto Eliexer Pelaez Pacheco
Labores de siembra de alimentos en el campamento de pioneros Qué siempre brille el sol // Foto Eliexer Pelaez PachecoLabores de siembra de alimentos en el campamento de pioneros Qué siempre brille el sol // Foto Eliexer Pelaez Pacheco

“El objetivo de nuestros trabajadores es sin dudas cumplir con la política del país de sembrar y lograr el autoabastecimiento al que fuimos llamados por nuestra ministra, que aunque lo que tenemos no llega a cumplir nuestra demanda pues hoy elaboramos alimentos en 33 centros educativos, pero con nuestro aporte disminuimos gastos”.

Para lograr los éxitos en esta tarea en cada uno de los centros que se emprende esta acción existen los orientadores agropecuarios. “El objeto social de estas personas es atender la producción de alimentos en nuestro sector, aunque tenemos también docentes voluntarios que, sin romper el aislamiento y con toda la protección, también contribuyen a esta importante labor en estos momentos”.

A estos educadores que producen alimentos en nuestras instituciones del sector se unen los que se insertaron al contingente del municipio que brindan sus aportes en el polo productivo El caño. “Este es un grupo de 25 trabajadores nuestros que apoyan a la agricultura en esa área en conjunto con profesionales del deporte del territorio que asumen la acción. Esta ayuda también la brindamos en otro contingente similar que laboró en El Sitio donde ya se están recogiendo frutos para el pueblo de Manzanillo de lo que se sembró”, concluyó el director municipal de educación.