Prevenir para no enfermar

del Carmen Sierra Lamas, bióloga del laboratorio de entomología del centro municipal de higiene y epidemiologia // Foto Lilian Salvat

Manzanillo. Julio 23.- Los roedores son animales domésticos que tiene una gran importancia desde el punto de vista epidemiológico por las enfermedades que transmiten con daños perjudiciales a la salud humana.

Para el control de los mismos no es necesario que haya un tratamiento químico  biológico sobre ellos con recursos roenticidas; la licenciada María del Carmen Sierra Lamas, bióloga del laboratorio de entomología del centro municipal de higiene y epidemiologia, aborda sobre los prejuicios que estos animales causan  a la salud humana.

“Son muy conocidas por la población las enfermedades causadas donde destaca la Leptospirosis y la Rabia; en estos momentos de baja presencia en nuestro país pero de las cuales hay que tener cuidado y prevención”.

La especialista enfatiza en las medidas a tener en cuenta para la detención del aumento de los ratones: “debemos tomar acciones  para evitar que no prolifere la densidad de población de estos roedores, dadas básicamente en la limpieza e higienización en las viviendas, sus alrededores, así como en los centros  de trabajo y todos aquellos lugares donde sabemos que ellos se refugian.

El almacenamiento de los residuales sólidos que debe tener también un control y  una disciplina porque también constituye un atractivo para estos, el enyerbamiento, la acumulación de escombros, son también ambiente propicio para su propagación”.

Cuba tiene erradicada la Rabia, la leptospira y las más de 30 enfermedades causadas por estos roedores que afectan al hombre y a los animales domésticos como la peste bubónica, salmonelosis, brucelosis, leptospirosis, listeriosis, encefalitis y otras que llegan a través de sus mordeduras, orina, heces, así como por las pulgas que portan.

“El país tiene una situación económica  bastante difícil que no permite adquirir los recursos necesarios para el control con roenticidas y plaguicidas, pero el más importante y eficaz son las medidas preventivas sanitarias que tomamos en cada uno  de nuestros hogares y el entorno social”, concluye Sierra Lamas.

Los problemas ocasionados por los roedores,  son múltiples y se manifiestan por el incremento del riesgo epidemiológico, estos constituyen el grupo dominante de mamíferos que causan daños en un amplio universo de actividades, por lo que se hace necesario prevenir para no enfermar.