
En el Golfo del Guacanayabo, donde el aroma salitre se mezcla con el sonido de las gaviotas, se encuentra el Instituto Marítimo Pesquero Andrés González Lines, un lugar donde los adolescentes con la mirada puesta al horizonte aprenden los secretos del mar y se preparan para enfrentar los desafíos de una profesión ancestral.
Rodney Estrada Hernández, estudiante de segundo año de la especialidad Motorista Naval, de origen avileño, sueña con seguir los pasos de su padre quien también estudió en esta escuela.»He aprendido muchas cosas, los distintos tipos de arte de pesca, las especies, la biología marina, mi experiencia hasta ahora en la escuela ha sido excepcional, no tengo quejas», comenta Rodney con entusiasmo.
La escuela no solo transmite conocimientos técnicos, sino también valores como el respeto por la naturaleza, el trabajo en equipo y la responsabilidad. Leonardo González Castillo, director del Instituto, explica «queremos formar Pescadores completos, que no solo sepan pescar, sino que también sean conscientes del impacto de sus acciones en el medio ambiente y en su comunidad, la pesca es un sector estratégico para nuestro país y necesitamos formar profesionales altamente cualificados que puedan garantizar la sostenibilidad de los recursos marinos y el desarrollo económico».
Este centro de enseñanza fue fundado el 6 de septiembre de 1983, en sus inicios lo conformaban pequeñas naves de madera hasta que en el año 2000 una ONG Italiana sin fines de lucro, financió la remodelación por el grado de deterioro que presentaba la institución.

Este junto al instituto del mismo nombre ubicado en el Mariel, Artemisa, son los únicos centros de este tipo en nuestro país, especializados en la formación y titulación en las especialidades de Técnicos de Nivel Medio Superior en Patrón de Pesca y Motorista Naval de Pesca, con el objetivo de mantener la continuidad de la calificación del personal que trabaja en la rama extractiva del sector pesquero, desarrollo de los Cursos de la Organización Marítima Internacional (OMI), en la formación y actualización de conocimientos de la gente de mar y el sector pesquero, con vista a la expedición de los títulos y certificados, que acreditan su enrolo, y el desarrollo de Cursos de Habilitación y Complementación, en correspondencia con las necesidades identificadas de los trabajadores de tierra y de mar en las entidades del sector.
Este instituto ubicado en la Ciudad Pesquera de nuestro municipio Manzanillo, se encarga de la formación de los jóvenes procedentes en su mayoría de poblaciones pesqueras desde Sancti Spíritus hasta Guantánamo.
Hoy en día, el Instituto es un centro de excelencia que forma profesionales en el ámbito pesquero gracias a profesores altamente cualificados, como el caso del profesor de Biología Marina, Enrique Rodríguez Zamora.
«Soy graduado de la licenciatura en Ciencias Biológicas en el campus Blas Roca Calderío, ingresé en el Instituto en el año 1985, desde entonces estoy aquí. Mi vida como profesor es una experiencia enriquecedora y desafiante a partes iguales, pues aquí me especialicé en Biología Marina y tengo un título de Patrón, cada día tengo el privilegio de sumergirme en un mundo donde la ciencia se encuentra con la tradición y la teoría se pone a prueba con la práctica», cuenta Kiki como cariñosamente lo llaman otros trabajadores del centro.

Como Biólogo Marino, su papel va más allá de impartir clases teóricas su objetivo es transmitir la pasión por la vida marina, despertar la curiosidad científica y fomentar el pensamiento crítico en los alumnos.
La escuela cuenta con una cantidad de 16 profesores divididos en asignaturas técnicas y las de formación general como matemática, inglés, español, informática, entre otras. Los profesores de las asignaturas técnicas, muchos son ingenieros y se han superado para entrar al mundo del magisterio.
Preparar patrones y motoristas para la flota pesquera en el turismo, transporte de la pesca fluvial ya sea en el mar como en agua dulce, es el objetivo fundamental del instituto, actualmente cuenta con una cantidad de 14 estudiantes en la especialidad de motorista naval siete en patrón de segunda y 17 estudiantes de cuarto año próximos a graduarse en diciembre.
Los estudiantes se rigen por un reglamento estudiantil, de carácter semi militar. «Uno de los aspectos más importantes es la disciplina, la vida en el mar exige una gran responsabilidad y un estricto cumplimiento de las normas de seguridad», plantea Alejandro Rodríguez León Subdirector de Internado y Jefe de Grado del Instituto.
Rodríguez León también abordó sobre las condiciones del dormitorio y la alimentación así como las transportación de los estudiantes: «Actualmente hay 16 estudiantes internos y siete manzanilleros los cuales son semi internos, la escuela garantiza la adecuada alimentación para los estudiantes y se encarga de la transportación de los mismos cuando tienen pases. Los estudiantes provienen del sistema nacional de educación. Normalmente el proceso de captación se hace a través de las direcciones municipales de Educación y empresas de la Pesca, y responde a las necesidades de cada territorio, con un índice mayor de 85 puntos. Al concluir, los jóvenes deben incorporarse a las empresas por medio de las cuales fueron captados en cada uno de sus territorios. El futuro de la pesca está en manos de adolescentes y jóvenes como los que se forman en el Instituto Pesquero Marítimo «Andrés González Lines».
Con su pasión, conocimientos y compromisos, están llamados a ser los guardianes del mar y asegurar un futuro sostenible para las generaciones venideras.