
Manzanillo. Agosto 20.- Del 21 al 24 de agosto, esta costera localidad, se celebrará sus fiestas populares, en un contexto marcado por limitaciones económicas y electroenergéticas que han exigido una planificación rigurosa, multisectorial y profundamente comprometida con el bienestar ciudadano.
Sobre los detalles organizativos, el Intendente de la ciudad del Golfo, Dunier Tamayo Casanova, ofreció declaraciones exclusivas a nuestro medio, en las que explicó con transparencia los retos enfrentados, las decisiones tomadas y las acciones previstas para garantizar el disfrute de la población.
Una decisión sostenida por la voluntad política
“Desde el inicio del verano se definió que las fiestas populares se mantendrían, como expresión cultural y espacio de recreación, independientemente de las condiciones del país”, afirmó Tamayo. “Se trata de preservar una tradición que fortalece el tejido social, que permite el reencuentro entre generaciones y que brinda a la familia manzanillera un momento de esparcimiento necesario”.
La decisión de realizar las fiestas fue ratificada durante la conferencia de prensa del verano, y se sostuvo a pesar de los desafíos logísticos y energéticos. La fecha del 21 al 24 de agosto fue seleccionada estratégicamente para no interferir con las acciones de aseguramiento al curso escolar, que comienzan el día 25.
“Era imprescindible evitar la coincidencia de dos procesos de alta demanda organizativa; por eso se optó por realizar las fiestas en la semana previa”, explicó el intendente.
Áreas principales y periféricas, planificación territorial
El área principal de las festividades se extenderá desde el Parque Infantil Mazó hasta la Avenida Moncada, incluyendo el Malecón y la Avenida Jesús Menéndez. En ese espacio se instalará una plataforma de audio profesional en la intersección de Jesús Menéndez y Mercedes, conocida como la tarima del pueblo. A partir del jueves, se presentará una revista cultural con talento local, y cada noche culminará con conciertos en vivo. El domingo, por razones organizativas, la presentación será más temprana.
Además, se mantendrán activas zonas periféricas como Las Novillas, Largarroba y Troya, que han funcionado durante el verano. Estas áreas contarán con respaldo energético gestionado por proyectos privados y MIPYMES, en coordinación con el gobierno local.
“La distancia entre estas zonas y el área principal, sumada a las limitaciones en la transportación, nos llevó a mantenerlas como espacios autónomos, con programación propia y respaldo técnico diferenciado”, señaló además Tamayo.
El horario límite para las actividades será la medianoche, en función de garantizar la seguridad ciudadana y el control organizativo. “No podemos comprometer la tranquilidad pública. Por eso se han establecido límites claros y se ha dialogado con todos los actores involucrados”, añadió.
Actividades infantiles, compromiso con todos los grupos etarios
El intendente explicó que, aunque el parque Valle Espín no podrá operar con todos los equipos habituales por limitaciones técnicas, se ha habilitado un área cercana para el disfrute de los más pequeños. “En algún momento tuvimos afectaciones con los transformadores, pero ya el servicio se restableció. Sin embargo, no contamos con las condiciones para aumentar la carga que generan los equipos tradicionales”, aclaró.
También se mantendrán activos el parque Masó y otras zonas con programación diurna, en coordinación con proyectos del INDER, Cultura y Educación. “Queremos que todos los grupos etarios encuentren espacios adecuados durante estas jornadas. Los niños tendrán actividades en horario diurno, mientras que los jóvenes y adultos contarán con música grabada, ofertas gastronómicas y espacios recreativos en zonas como el Malecón, la calle Sariol y la carpa de Palmares”, detalló Tamayo.
Paseos, conga y participación popular
Se prevé la realización de paseos populares el viernes, sábado y domingo, con posibilidad de incluir el jueves, aún en definición. También se ha confirmado la presencia de la Conga de Guaymar, agrupación que ha acompañado las festividades en años anteriores y que cuenta con gran aceptación popular. “Solo resta asegurar el combustible, pues el equipo de transportación ya está listo”, señaló.
El intendente reiteró que el respaldo energético está previsto hasta la medianoche, sujeto a las condiciones del país, la provincia y el municipio. “Existen circuitos que no pueden apagarse por razones técnicas y sociales, como los que respaldan servicios hospitalarios y de abasto de agua. Por ello, hemos sido transparentes con la población y pedimos comprensión ante posibles afectaciones”.
Seguridad, civismo y responsabilidad compartida
Tamayo destacó que se ha trabajado de conjunto con las fuerzas del orden público para garantizar el comportamiento adecuado de las personas. “Desde que comenzó el verano hemos sido rigurosos en este tema. A pesar de algunos incidentes, que lamentablemente ocurren, siempre hacemos un llamado a disfrutar con tranquilidad. La seguridad ciudadana es esencial en eventos de esta magnitud”.
También hizo referencia a la diversidad de opiniones que circulan en los espacios físicos y digitales sobre la realización de las fiestas. “No todo lo que uno percibe en redes sociales refleja la realidad. Hay opiniones divergentes, pero creemos que existe un sector amplio de la población que agradece y necesita estas actividades, después de un año de trabajo y un verano con limitaciones”.
Un cierre digno para un verano atípico
“Estas fiestas son el colofón de un verano atípico, pero también una muestra del esfuerzo del gobierno, el Estado y el Partido por acompañar al pueblo en medio de circunstancias complejas. No todo será perfecto, pero confiamos en que el pueblo manzanillero sabrá valorar este gesto y disfrutar con civismo y alegría”, expresó Tamayo.
El intendente reconoció que no se cuenta con todos los recursos deseados, pero sí con la voluntad política y el compromiso institucional. “No es todo lo que quisiéramos, ni todo lo que pudiéramos brindar, pero se ha trabajado con seriedad y entrega. Como toda obra humana, puede tener detractores, pero creemos que el pueblo manzanillero merece estas fiestas. En ello hemos trabajado, y solo esperamos que ese mismo acompañamiento se mantenga”.
Finalmente, Tamayo destacó el impacto positivo de las actividades realizadas durante el verano en los barrios y consejos populares. “La participación del pueblo en el Primero de Mayo, en el acto del 22 de julio, y en las actividades comunitarias, demuestra que existe una voluntad colectiva de seguir adelante. Las fiestas populares son parte de ese esfuerzo, y confiamos en que serán del agrado de la población, a pesar de todas las situaciones”.