Manzanillo. Julio 2.- Si hay algo que ha caracterizado al pueblo cubano durante más de seis décadas es la sobrada demostración de lo que se puede lograr y la capacidad de resistencia, que se adquiere cuando se alcanza la verdadera unidad que se necesita para defender las conquistas de una nación soberana.
Para la protección de esa unidad contamos con una arma poderosa y es la moral de nuestro único partido. Bien lo sabe el manzanillero Basilio Tamayo Hernández, quien conoce lo que significa el papel del Partido Comunista de Cuba (PCC) en defensa de la armonía de nuestro pueblo.
Basilio lleva 34 años militando en las filas del PCC y hoy tiene suficientes razones, así como elementos para mostrar cuánto representa el accionar de la membresía de esta organización política para preservar la unión de los cubanos en los momentos actuales.
«Hoy el partido debe jugar un rol de vanguardia, no solo porque esté consagrado en el artículo cinco de la Constitución de la República de Cuba, sino por la necesidad de mantener aglutinado al pueblo de esta isla junto a su Partido en aras de lograr el objetivo que nos hemos trazado: construir un socialismo próspero y sostenible.
«En los momentos actuales tenemos una coyuntura difícil en medio de pandemia que ha afectado al mundo, y se nos hace más complicado todo porque enfrentamos los efectos del bloqueo económico y financiero de los Estados Unidos que entorpece el desarollo de nuestra sociedad y la adquisición de recursos necesarios».
Algo esencial que facilita que se mantenga nuestra unidad a pesar de todo, es la ventaja de contar con un sólo partido. Así lo asegura este Mayor retirado de las filas del Ministerio del Interior (Minint) quien hace vida de militante en el núcleo de jubilados de la circunscripción 28-A, donde es además su secretario general.
«Todos los revolucionarios aglutinados en ese único partido trabajamos para lograr el desarrollo de nuestro país. No necesitamos ningún otro porque, en primer lugar, no es un partido electoral, este se constituyó para dirigir los destinos de la sociedad cubana».
Entonces para alcanzar esa unidad con que contamos requerimos algo importante que deben tener siempre en cuenta los militantes. «Para eso necesitamos y luchamos cada día más por elevar la ejemplaridad de la militancia en el vínculo con las masas, cómo actuar en la comunidad y otros elementos que permitirán alcanzar esa unión», destacó Tamayo Hernández.
– ¿Por qué es tan importante esa unidad de nuestro pueblo?
-«Esa unidad es lo que nos ha llevado desde Martí y hasta nuestros días, la misma que nos ha caracterizado para obtener los logros que tenemos. El Apóstol fundó una organización única para dirigir la lucha en la guerra necesaria, después como continuidad se funda en 1925 el Primer Partido Comunista de Cuba que hoy nos toca preservar.
«Ahora que celebramos su Octavo Congreso debemos mantenerlo vivo en los centros de trabajo, las comunidades y en cualquier parte donde exista un militante».