
Como un diálogo constructivo y de respeto en el que se han fortalecido los nexos bilaterales para construir puentes de entendimiento definió Elio Rodríguez Perdomo, viceministro de Relaciones Exteriores, los años de relaciones diplomáticas que han mantenido Cuba y la Santa Sede.
A la ceremonia de cancelación postal de la emisión especial de primer día, en conmemoración al aniversario 90 de estas relaciones, establecidas el 7 de junio de 1935, asistió Bruno Rodríguez Parrilla, miembro de Buró Político del Comité Central del Partido y ministro de Relaciones Exteriores; además del Monseñor Paul Richard Gallagher, secretario para las Relaciones con los Estados y las Organizaciones Internacionales de la Santa Sede.
Allí, Rodríguez Perdomo resaltó la visita que diera al Vaticano del General de Ejército Raúl Castro Ruz, en mayo del 2015, así como el viaje apostólico del Papa Francisco a Cuba, en septiembre del propio año.
Destacó que en todas las visitas apostólicas realizadas a nuestro país por los Sumos Pontófices y Su Santidad Kirill, Patriarca de Moscú y Toda Rusia, se reflejó la nobleza, el espíritu solidario y el valor moral del pueblo cubano, que recibió a los líderes de la Iglesia Católica con respeto y calidez.
Los intercambios de alto nivel entre Cuba y la Santa Sede, han reflejado la evolución ascendente de los vínculos que han quedado grabados en la memoria de la nación cubana, agregó.
En ese sentido, las relaciones diplomáticas de estas naciones, serán cimiento para continuar profundizando los lazos, «voluntad que renovamos en el inicio del pontificado de Su Santidad León XIV», puntualizó.
En la cita estuvieron presentes Caridad Diego Bello, jefa de la Oficina de Atención a los Asuntos Religiosos del Comité Central del Partido; Ana Julia Marine López, viceministra de Comunicaciones; Pablo Julio Pla Feria, presidente del Grupo Empresarial Correos de Cuba, de manera especial el Monseñor Antoine Camilleri, nuncio Apostólico de Cuba; la Eminencia Cardenal Juan de la Caridad García Rodríguez, Arzobispo de La Habana y el Monseñor Marcelo Arturo González Amador, presidente de la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba.


