Acceso al empleo y trabajo social, prioridades hoy en el desarrollo de Cuba

Foto Estudios Revolución

Para atender a las personas en situación de vulnerabilidad, lo primero que tenemos que ofrecer es un empleo, apuntó el miembro del Buró Político y Primer Ministro de la República, Manuel Marrero Cruz, durante la reunión de Balance del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS).

La idea del Jefe de Gobierno, que incluye dos frentes vitales para el desarrollo del país que conduce este Ministerio: el trabajo social y el acceso al empleo, fue eje central del debate al que asistió también, el viceprimer ministro y titular de Economía y Planificación, Alejandro Gil Fernández.

Al inicio del intercambio -que resultó abundante en voces y criterios- la titular de MTSS, Marta Elena Feitó Cabrera, detalló el adverso contexto del 2021, caracterizado por la confluencia del enfrentamiento a la pandemia, el recrudecimiento del bloqueo, y la agresividad en la campaña mediática contra la Isla.

En este escenario, apuntó, el MTSS resistió y avanzó, así lo demuestra la implementación de las propuestas de políticas que presentaron al Gobierno, donde destacó la organización salarial de los trabajadores del sistema empresarial de forma descentralizada, y el fortalecimiento del trabajo por cuenta propia como modalidad de empleo y de prestación de servicios, con trámites simplificados mediante el servicio de ventanilla única.

Significó además la ampliación de la protección a la maternidad de las trabajadoras y la responsabilidad de las familias, así como la cobertura de riesgos de la seguridad social y la atención a las personas y comunidades en situación de vulnerabilidad, incluyendo el trabajo en los barrios.

A partir de un proceso de evaluación crítica de los resultados del 2021 -expresó Feitó Cabrera- se identificaron los principales problemas en materia de empleo, ingresos, seguridad social, prevención, y atención social y comunicación.

En consonancia con los resultados, deficiencias y proyecciones que recogió el informe, el Primer Ministro reconoció la labor del MTSS por buscar soluciones en tiempos difíciles, para que nadie quedara desamparado, sin embargo señaló que a pesar de todo, “no nos podemos conformar porque aún es insuficiente”.

Marrero Cruz insistió en que hay que estudiar cómo atender a los nuevos actores económicos. “Se debe hacer de la misma manera en que se atiende el trabajo estatal, no lo concibo separado”, se trata, apuntó, de políticas inclusivas que estamos implementando, no de prohibitivas.

El MTSS, para ello, debe estar muy conectado con el Ministerio de Economía y Planificación (MEP) y con el Instituto de Ordenamiento Territorial y Urbanismo (INOTU). Subrayó que la tarea no termina cuando se autoriza la creación de una Mipymes, una cooperativa o un trabajo por cuenta propia, hay que acompañarlos, capacitarlos, controlarlos, exigirles.

El Primer Ministro, en tono conversacional, recordó las insatisfacciones que le han sido planteadas a través de la presencia de los máximos dirigentes del país en los barrios y, son precisamente esas experiencias, las que le permiten afirmar que las políticas implementadas aún no tienen el impacto deseado, por ello exhortó a una clasificación justa de las personas en situación de vulnerabilidad, que contribuirá a distribuir los recursos entre quienes verdaderamente lo necesitan: presupuesto que destina la Revolución y que consideró “el mejor invertido”.

Por qué ha vuelto a niveles bajos el trabajo a distancia y el teletrabajo, luego de la eficacia demostrada en la pandemia -preguntó Marrero Cruz- que también se refirió a la necesidad de potenciar el acceso de los jóvenes a opciones de trabajo atractivas, al temor a que ellos ocupen puestos de dirección, ignorando que casi siempre impregnan creatividad, entusiasmo y rompen estereotipos en los lugares donde laboran.

En intercambio con los presentes, el integrante del Buró Político, exhortó a revisar los contenidos de trabajo de cada plaza en las plantillas, la poca explotación del pluriempleo, la necesidad de hacer sistemática la capacitación de los funcionarios en la direcciones municipales de Trabajo, que son cruciales en la gestión de empleos que respondan a las estrategias de desarrollo local y que deben garantizar el acceso de mujeres, jóvenes y personas en situaciones de discapacidad a labores dignas.

Estamos en una guerra, pero no de armas de fuego -afirmó Marrero Cruz- al hacer una relatoría de lo que ha enfrentado Cuba en los últimos 2 años: un bloqueo recrudecido con 243 medidas, aplicadas, incluso, sin piedad durante la pandemia COVID-19, la campaña mediática feroz para deslegitimar a la Revolución Cubana, una dinámica demográfica marcada por bajos niveles de fecundidad y el creciente envejecimiento.

Muy esclarecedor fue entonces, la explicación de las estrategias sociales y económicas que ha diseñado el país para saltar por encima de tantos obstáculos.

Al concluir, Marrero Cruz agradeció el intercambio aportador y transparente, que en sus palabras lo deja con deseos de profundizar, por ello prometió volver para hacer talleres sobre temas cruciales como el empleo, los ingresos y la atención a los nuevos actores económicos.