
Es la obra de Amaury Palacios Puebla un devenir por la historia de Cuba en la expresión fecunda del retrato. Este manzanillero artista plástico es conocido por llevar al lienzo figuras de la talla de Bartolomé Masó, Perucho Figueredo, Miguel Barnet, la Prima Ballerina Absoluta Alicia Alonso y el insigne historiador de La Habana Eusebio Leal.
En sus retratos resulta de especial interés la figura del patricio Carlos Manuel de Céspedes. A quien ha inmortalizado varias veces en sus lienzos. Hoy a 151 años de la caída en combate del Padre de la Patria, Amaury comenta lo que ha significado este prócer en su obra.

“Soy un cespediano acérrimo y consumado, desde que comencé en el año 2000 a profundizar en la vida y el pensamiento de Céspedes, más allá de lo usualmente se conoce y que en esos años me vinculara en proyectos de patrimonio en Bayamo relacionados con la pintura, de alguna manera me llevó a investigar a profundidad esa etapa de la historia de Cuba que me apasiona, la etapa fundacional de la nacionalidad cubana y de las raíces patrióticas, en este contexto la figura de Céspedes prevaleció, fue algo que me impactó muchísimo, su personalidad contradictoria, las cosas que lo hacen grande.”
Muestra de ello es su cuadro Céspedes con el uniforme de Campaña donde estampa en óleo sobre lienzo la gallardía e intrepidez del primero que se lanzara a la lucha en 1868. Por la precisión e iconografía que mitifica al Céspedes de la guerra esta imagen se convirtió en portada en una de las ediciones de la revista cubana Bohemia y encabezó además el libro Céspedes estadista y estratega.
Otro cuadro en el que muestra una visión tal vez más pasiva del Padre de la Patria es Ucronía esta palabra que se refiere a la narración especulativa acerca de posibles advenimientos que habrían acontecido si los sucesos factuales se hubieran desarrollado de la manera lógica alterna, encierra el significado de la pieza, que esboza una conversación entre nuestro héroe nacional José Martí y Carlos Manuel de Céspedes. Esta instalación de dimensiones variables tiene el poder de llevar al espectador a hacerse la gran pregunta: ¿Qué conversarían Martí y Céspedes si se hubiesen conocido?

Y es que en la vasta obra de Palacios Puebla convergen de agradable manera su clara influencia de la Escuela Valenciana de pintura de finales del siglo XIX y principios del siglo XX, con el referente de Joaquín Sorolla a quien considera su pintor de cabecera, para dar vida a pasajes y personalidades que de una forma u otra han consolidado el proceso de formación de la nacionalidad cubana.
Amaury Palacios Puebla, pintor manzanillero que cuenta con 11 exposiciones personales, más de 30 exposiciones colectivas, merecedor de premios y menciones en numerosos eventos y con muestras permanentes en la Casa de la Nacionalidad Cubana y el Museo Nacional de Danza, este año arribará a 30 años de vida artística, que celebra siendo un digno embajador de la cultura cubana y un difusor de lo más hermoso de la historia de su país.