Desde 2012 el Banco Internacional de Inversiones (BII) ha destinado cerca de 50 millones de Euros a proyectos relacionados con Cuba.
Esta millonaria suma se ha dirigido fundamentalmente a la exportación de autopartes, al arrendamiento de aviones, la financiación comercial en apoyo a la reexportación del azúcar crudo cubano, de Francia a Bielorrusia, y a la financiación de asistencia técnica brindada por la República Checa a la mayor de las Antillas.
“Hasta ahora hemos trabajado con instituciones financieras intermediarias que conocen muy bien el mercado cubano, sin embargo, a partir de la firma de nuevos acuerdos nosotros asumiremos completamente el riesgo en el mercado cubano”, adelantó este jueves Vladimir Liventsev, vicepresidente del BII.
Hoy, en el marco de la XXXIV Feria Internacional de La Habana (FIHAV 2016), el Banco Central de Cuba y el BII, entidad financiera fundada en 1970 por países miembros del extinto Consejo de Ayuda Mutua Económica (CAME), realizaron un intercambio de experiencias y firmaron acuerdos de cooperación “para allanar el camino en pos de la ejecución de actividades de financiamiento”, aseguró Jozef Kollár, también vicepresidente del BII, en el Salón Ejecutivo de Expocuba.
Arnaldo Alayón Bazo, vicepresidente del Banco Central de Cuba (BCC) y jefe de la delegación cubana ante el BII, dijo: “Valoramos altamente la disposición del BII de ejecutar operaciones encaminadas a fortalecer el desarrollo socioeconómico de la Isla y de crear condiciones favorables para captar inversiones hacia nuestro país, en sectores priorizados, así como la voluntad mostrada en elevar los niveles de negocios y la coordinación de acciones que coadyuven a organizar y desarrollar esos procesos inversionistas.
“Mantenemos como objetivo principal de nuestra presencia en el BII, continuar esforzándonos en apoyar aquellas acciones que contribuyan al fortalecimiento del Banco y estrechar las relaciones con él y con sus países miembros, basadas en los documentos fundacionales y en el reciente acuerdo de cooperación para la ejecución de actividades de financiamiento entre el BII y el Banco Central de Cuba”, afirmó Alayón Bazo.
Este Banco multilateral de desarrollo, en el nuevo contexto cubano, se ha interesado por financiar proyectos relacionados con sectores priorizados como el agroalimentario, energía renovable y derivados de la caña de azúcar, como el alcohol. Así como respaldar a pequeñas y medianas empresas nacionales.
“El Banco Internacional de Inversiones ha buscado los medios para financiar proyectos cubanos, prestando especial atención a los que se puedan desarrollar en conjunto con estados miembros de nuestra entidad. Somos la única institución financiera de desarrollo de la que Cuba forma parte, país que tiene un lugar especial en nuestro banco, del cual ha sido accionista durante más de cuarenta años”, aseguró Kollár.
Dentro del marco del acuerdo con el Banco Central de Cuba, el BII estableció en 2016 que habrá un límite de 50 millones de Euros para operaciones directas en Cuba, una cifra que se espera que crezca en los próximos años.
El Banco Internacional de Inversiones ha ofrecido apoyo empresarial adicional a nuestro país, que ha incluido un seminario para las empresas de Europa Central y Oriental sobre cómo hacer negocios con Cuba, así como un fondo de asistencia técnica de 1,23 millones de Euros destinados para actividades en Cuba y otros países.
El BII es una institución multinacional con una composición interregional única de nueve estados miembros, cinco de la Unión Europea, Bulgaria, la República Checa, la Eslovaca, Hungría y Rumanía; Vietnam, Mongolia, la Federación de Rusia y Cuba, desde 1974.