Tras 49 días de cierre total a causa de la situación epidemiológica causada por la enfermedad COVID-19, la ciudad de Ciego de Ávila abre de nuevo los límites de su perímetro urbano, a partir de hoy, aunque mantiene la fase de transmisión autóctona limitada.
La decisión del Consejo de Defensa Provincial (CDP) tiene en cuenta los avances experimentados en el control de la pandemia y la necesidad de estimular la actividad económica, fundamentalmente la que se desarrolla fuera del área citadina y que requiere del movimiento de un número importante de trabajadores.
No obstante, se mantendrán vigentes el resto de las medidas como paralización de transporte de pasajeros y regulación de los servicios del comercio, la gastronomía, los bancos, ETECSA y Joven Club.
También permanecen cerrados bares, discotecas y otros centros que puedan generar aglomeraciones de personas, se exige el uso permanente del nasobuco, el distanciamiento físico y social, y otras acciones sanitarias encaminadas a evitar la proliferación del virus SARS CoV-2.
Carlos Luís Garrido Pérez, Presidente del CDP, reconoció las afectaciones provocadas por las restricciones en tareas de gran impacto como la fabricación de materiales de construcción, inversiones e industria y la necesidad de potenciar la producción de alimentos.
Exhortó al pueblo a actuar de manera disciplinada y responsable para hacer posible el tránsito hacia otras fases recuperativas en el menor tiempo posible.
Según refleja el sitio digital Invasor, en el municipio de Ciego de Ávila se mantienen activos dos eventos de transmisión local, ambos en la periferia de la ciudad: uno en el kilómetro 3 ½ de la carretera hacia Canaleta y otro en la comunidad Nueve de abril, este último con posible fecha de cierre para el 4 de noviembre.
Durante el rebrote que comenzó el 25 de agosto, la provincia ha reportado más de 600 casos positivos a la COVID-19 y 15 fallecidos.