El siniestro ocurrido el lunes se extendió por varias horas y causó daños importantes a la parte superior y el interior de la catedral, pero la fachada con sus dos torres consiguieron mantenerse en pie.
La reconstrucción del templo católico ha sido calificada como una prioridad, y ya reunieron casi mil millones de euros en donaciones para esas labores.
El gobierno de Francia anunció ayer el lanzamiento de un concurso internacional de arquitectura para la reconstrucción del templo.
Al finalizar un Consejo de Ministros dedicado exclusivamente al tema, el primer ministro Edouard Philippe comunicó la decisión de realizar la competencia, encaminada a ‘dotar a Notre Dame de una nueva aguja adaptada a las técnicas y a los desafíos de nuestra época’.
El concurso forma parte de las primeras acciones dirigidas a impulsar la reconstrucción de la catedral, que el presidente Emmanuel Macron prometió completar en solo cinco años.
Notre Dame fue construida de 1163 a 1345 en la Isla de la Cité, donde surgió la ciudad de París, y constituye en la actualidad uno de los lugares más emblemáticos de la capital de Francia, así como el monumento histórico más visitado de Europa.
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