Manzanillo. Julio 1.- La alegría se anuncia, la gente espera esta época del año con muchas ganas y deseosa de ver cada una de las disímiles iniciativas y competencias que cada temporada trae Ecos del Carnaval.
Un programa radial que calienta cada verano y simula el ambiente carnavalesco típico de esta costera localidad, los escenarios, bien puede ser las alturas de Maceo, el Círculo Social de Jibacoa o vaya a usted a saber que otro sitio de la geografía manzanillera.
Llegan a cada espacio de transmisión colmados de equipos y enormes ganas de iniciar, ante la expectante vista de los moradores del lugar, avizorando el mejor de los rumbones, llega la propuesta recreativa radial y marca la diferencia en los meses estivales.
Unos llegan con sombrillas, pomos de agua y ropas protectoras para evitar el impacto del ardiente sol. Los más osados prefieren las camisetas y bermudas, pero el denominador común es el regocijo que segregan cuando socializan y se vuelven protagonistas de la programación radial, entre música carnavalesca y juegos muy divertidos.
Le caracteriza la fecha en la cual se apodera de las trasmisores radiales, la elocuencia de su equipo realizador, incluso de quienes permanecen en cabina al tanto de otras propuestas competitivas para oyentes que resuelven no burlar la furia del astro rey y, esencialmente, el carisma de Nilda Baños García a dúo con el ocurrente Rocles Figueroa Vega.
Este último comenta que “significa mucho compromiso porque tenemos que llevar la alegría al pueblo, exige una preparación constante pues el programa es en vivo y con el público interactuando constantemente, es sacrificado por el tiempo que usamos para trasladarnos ya que visitamos la mayor parte de los barrios y concejos populares del municipio y luego el de transmisión”.
“Es un placer ser parte de esta temporada que es la número 40, mantener el ritmo y las expectativas de los oyentes y los participantes es un reto que a diario tratamos de superar”, agrega el locutor que es miembro del colectivo por segundo año consecutivo.
“A veces llegamos a lugares donde las condiciones no están logradas y por ese público que nos espera hacemos esta propuesta, los locutores somos los encargados de las opciones de participación y las preguntas; este año seguiremos llevando diversión desde la picardía sin llegar a la vulgaridad, cosa que agradece el pueblo que cada día a partir de las dos de la tarde nos sintoniza”, continua.
La joven Nilda no quiso deja pasar la ocasión para expresar su sentir hacia esta propuesta radial “es una experiencia enriquecedora, primero por la oportunidad de crecernos, a la hora de interactuar directamente con el público, sabemos lo que quieren lo que les gusta, una forma de interactuar piel a piel con ellos, sobre todo con las motivaciones que tenemos ahora, queremos llegar a la fibra del manzanillero”.
“En este 225 cumpleaños de la ciudad queremos reconocer a personalidades que juegan un papel importante en las comunidades, ese es nuestro objetivo esencial este año estar bien cerquita de los manzanilleros y manzanilleras que nos siguen en cada transmisión”, apuntó
Las emociones fluyen cual resultado de las opciones ofrecidas por el espacio que celebra ya cuatro décadas. Aunque el colectivo se rige por un guion, la gracia característica de los locutores permite enriquecer el contacto con los receptores. Les distingue cierto grado de improvisación y picardía, lo cual hace más emocionante cada entrega.
Así nos confirma Idalmis Solá, quien asume este año la dirección, “es una satisfacción y a su vez un reto por el número de personalidades que tiene en su haber este colectivo, dígase José Luis García Barban, me enfrento a una situación nueva pero que disfruto muchísimo porque este ambiente es mi pasión”.
“Pretendemos rescatar algunas de las opciones que antes tenía Ecos del Carnaval, el tratamiento a las tradiciones, mayor participación de artistas de las diferentes manifestaciones y los temas propios de la localidad, pretendiendo que se convierta en un referente cultural donde los personas se diviertan, se recreen y sobre todo que aprendan de las cosas que hacen que Manzanillo sea importante”, puntualizó.
Si lugar a dudas todo el que participa en la transmisión o el que lo oye desde su radio receptor se llena de júbilo y se contagia con la alegría que trae aparejada el rumbón mayor de esta urbe que a decir de muchos es uno de los mejores del país.
Durante todo el mes de julio y parte de agosto justo hasta el día que dan inicio estas fiestas citadinas, a partir de los dos de la tarde y hasta las cuatro de lunes a viernes mientras que sábados y domingos extendido a las cinco de la tarde los aficionados a esta radio difusora que ya está próxima a su 85 cumpleaños disfrutaran de novedosas y frescas propuestas participativas.
