
Manzanillo. Marzo 4.- Centrar la educación como un acto de liberación y concienciación para lograr un modelo de dirección educativo que promueva el diálogo, la crítica y la reflexión, donde el conocimiento se deposita pasivamente, fue la idea entorno a la cual reflexionaron los delgados de la Asamblea Municipal del Poder Popular en Manzanillo este fin de semana.
Así trascendió trascendió en un encuentro sostenido en el salón de reuniones del gobierno en esta ciudad, con el Máster en Ciencias Diedmar Céspedes Cabrera, profesor de la Facultad de Educación Media del Campus Blas Roca Calderío de la Universidad de Granma, quien propuso este enfoque como poderosa herramienta para fortalecer el tejido social y fomentar un sentido de responsabilidad compartida entre los miembros de la comunidad y el grupo de trabajo comunitario.
En el encuentro que contó con la participación de Rossio Naranjo Figueredo, presidenta de la Asamblea Municipal del Poder Popular de Manzanillo debatieron sobre la necesidad y la importancia de desarrollar una conciencia crítica en los ciudadanos, lo que les permite identificar y cuestionar las estructuras de poder y apoyo en su entorno, para empoderar a las comunidades a actuar y transformar su realidad.
Durante el intercambio con los delegados, Diedmar Céspedes Cabrera, también integrante del proyecto Costa Viva, fomentó el diálogo de los integrantes del grupo de trabajo comunitario con las masas para promover una relación horizontal en la que todos aprenden unos de otros, lo que es fundamental para construir comunidades más cohesivas y participativas.
El también profesor auxiliar de la casa de altos estudios granmense enfatizó a los delegados el papel de la educación y su relación con la realidad de la comunidad y el papel que pueden desempeñar las prácticas comunitarias para implementar proyectos que respondan a las necesidades identificadas por la comunidad.