Manzanillo. Junio 26.- En el marco del Día Internacional de la Lucha contra el Uso Indebido y el Tráfico Ilícito de Drogas, el psicólogo Erik Santana Prohenza, integrante de los Equipos Básicos de Salud Pública en Manzanillo, lanzó una contundente advertencia sobre el creciente impacto de este flagelo en las comunidades locales.
«Las drogas son el megaflagelo, lo hemos dicho en todas las intervenciones», afirmó Santana Prohenza con énfasis. «Esto es un problema de múltiples facetas que afecta a la vida de millones de personas en todo el mundo, pero hoy, en nuestras comunidades, está en aumento».
El profesional de la salud mental profundizó en la complejidad del impacto: «El efecto de las drogas es complejo y de gran alcance». Señaló un error común como punto de partida del problema: «La mayoría de las personas pecan en función de que creen que lo pueden manejar». Esta falsa percepción de control, explicó, es una de las puertas de entrada al consumo problemático.
Frente a este panorama desafiante, Santana Prohenza abogó por soluciones basadas en evidencia: «Para hacer frente a este problema se necesita un enfoque basado en pruebas científicas que dé prioridad a la prevención y, sobre todo, al tratamiento». Destacó que esta estrategia «debe surgir con la contribución de todos en las comunidades», enfatizando que la responsabilidad es colectiva.
«Es la familia la principal célula de la sociedad, la que debe decir basta», refutó enfatizando en la necesidad de que el núcleo familiar actúe como primera barrera de contención, fomentando valores, comunicación y detección temprana de riesgos.
Finalmente, Santana Prohenza se refirió al lema de la campaña global de este año: Rompamos el ciclo, explicó que este llamado “pone de relieve la necesidad de una acción coordinada, no quedarnos solos frente al enfrentamiento del problema a largo plazo para salir del círculo de la delincuencia organizada y el tráfico de las drogas”.
Su mensaje fue claro, solo la unión de esfuerzos comunitarios, institucionales y familiares, sostenidos en el tiempo y guiados por la ciencia, podrá romper el ciclo destructivo de las adicciones en Manzanillo.