El poder del pueblo me energiza

Ortelio Moreno // Foto Roberto Mesa

Manzanillo. Septiembre 10.- Ortelio Moreno Enamorado y el cansancio son incompatibles. Para este manzanillero no parece existir esa palabra en su diccionario cotidiano porque no escatima ni día ni horas para hacer por su comunidad.

Hace cuarenta años este hombre asumió una decisión que cambió para siempre el rumbo de su existencia: con 17 abriles aceptó formar parte de una iniciativa que surgía por aquella fecha en la provincia de Matanzas, los órganos del Poder Popular.

“Estudiaba la secundaria básica en aquel territorio occidental y mis compañeros me eligieron como su delegado de una circunscripción especial, que atendía ese centro y un preuniversitario.”

“Las primeras tareas se me hicieron muy fáciles porque estaban vinculadas a la calidad de la alimentación que se ofrecía en esas instituciones, la recreación, así como los viajes a sitios de interés histórico y cultural de Matanzas.”

De natural espíritu emprendedor y liderazgo, Moreno Enamorado jamás se pudo apartar de las tareas gubernamentales, ni cuando se desempeñó en la empresa Radiocuba y más tarde saldría de las aulas de la Universidad de Granma convertido en licenciado en Comunicación Social.

“Retorné a mi comunidad rural de Jibacoa y el pueblo me eligió delegado de la circunscripción 67, El Descanso, y desde 1991 soy el presidente de ese Consejo Popular.”

“Tengo la posibilidad, como corresponsal de la radio local, de divulgar lo que hacemos en el barrio y eso estimula a la gente a unirse, a continuar construyendo.”

“El poder del pueblo es inmenso, imprescindible, a mi me energiza. Todos juntos edificamos un círculo social que hoy es orgullo comunitario y ahí organizamos nuestras fiestas y actos. Aunque queda mucho por alcanzar, las personas agradecen las respuestas esclarecedoras, con argumentos sólidos.”

“El pueblo tiene que ver al delegado del poder popular como un guía, un ejemplo a seguir. Debemos ser los primeros en todo, y más ahora que actualizamos nuestro modelo económico y social y se perfilan nuevas misiones a los gobiernos municipales para descentralizar tareas.”

Mi entrevistado fue diputado al Parlamento cubano en la Sexta legislatura y por 15 años delegado a la Asamblea Provincial del Poder Popular en Granma.

“Fueron tiempos inolvidables, de aprendizaje. Estuve cerca de la dirección histórica de la Revolución. Aprender a legislar, elegir a los integrantes del Consejo de Estado, escuchar las intervenciones y criterios de Fidel y Raúl.”

“Al Poder Popular he entregado mi vida y no me arrepiento, siento satisfacción al ver que las personas lo agradecen, hacer el bien en la medida de las posibilidades.”

“Durante estas cuatro décadas he desplegado todo mi sacrificio, esfuerzo y empeño y seguiré mientras me acompañe la vitalidad, que aún es mucha.”