
Manzanillo. Diciembre 20.- Enfrascados en garantizar el circuito eléctrico de la zafra azucarera, próxima a iniciar, la poda de árboles que puedan dañar las líneas, los trabajadores de la Unidad Empresarial de Base (UEB) de Manzanillo perteneciente a la Empresa Eléctrica de Granma, laboran en los días restantes del actual calendario.
Quehaceres que incluyen además mantenimientos y reparación de averías en el sistema, «estas acciones son fundamentales, con la escasez de recursos evitan daños en los tendidos», comenta Lázaro Miguel Cardona de la Guardia, jefe de operaciones de la UEB.

«El trabajo se diseña en dos grupos de trabajo diarios, esta entidad trabaja 24 horas, contamos con una brigada de trabajo en caliente, otra de alumbrado, una pareja para trabajos de caídas de postes y un equipo técnico, este último compuesto por los ingenieros encargados de atender las líneas del municipio».
Miriam Pérez Cortés, jefa de grupo de distribución y especialista en redes y sistemas en esta entidad eléctrica manzanillera nos explica que: «atendemos los niveles de voltaje hasta el servicio a los clientes, hacemos constantemente el estudio de todas las líneas, actualizar el sistema de redes y planificar los mantenimiento a los transformadores y subestaciones».

A través del despacho provincial, se ordena a los dos carros de guardia de quejas o alguna solicitud de los clientes; en cuanto a los carros de brigadas, «nosotros planificamos los trabajos en dependencia del tiempo para los mantenimiento o averías en el sistema», comenta Cardona de la Guardia.
Unos 23 linieros atienden los 42 circuitos de este territorio entre los de 110 Kb, los de 33 Kb y los de distribución primaria, a través de estos últimos se les brinda manera directa el servicio a la población.
Rubislandis Rosales Blanco, es uno de esos linieros que ayudó en la recuperación del municipio Bartolomé Masó, luego del sismo ocurrido el pasado 10 de noviembre, «existieron daños a la infraestructura pero de conjunto con los de ese lugar logramos en breve tiempo devolver el servicio a los hogares de allí».
Hombre y mujeres de carne y hueso, que padecen como todo cubano las carencias actuales y el déficit del tan anhelado fluido, pero con deseos y disposición de prestar su servicio; no importa que tan difícil pueda ser o lo compleja de la situación.