Manzanillo. Diciembre 7.- A la memoria del Titán de Bronce Antonio Maceo, su ayudante Panchito Gómez Toro y de los 23 internacionalistas manzanilleros que legaron su vida en la defensa de la libertad de los pueblos hermanos, los hijos de la ciudad del Golfo peregrinaron hasta el cementerio local, a 29 años de la primera Operación Tributo.
En su lugar de reposo póstumo, el Panteón de los caídos por la defensa, con ofrendas florales depositadas a nombre del General de Ejército y primer secretario del Partido Comunista Raúl Castro Ruz, del presidente cubano Miguel Díaz-Canel Bermúdez, los Combatientes de la Revolución Cubana, familiares y del pueblo de Cuba y 21 salvas de artillería lanzadas al aire, volvió a enaltecerse el ejemplo de los jóvenes que hicieron historia en los trece años de presencia en Angola y en otras naciones de esa geografía continental como Etiopía.
Familiares y amigos de quienes partieron a cumplir la tarea redentora, al amparo de la estirpe e intransigencia del Lugarteniente General del Ejército Libertador Antonio Maceo, y la fidelidad de su ayudante Panchito, de cuya caída en combate se cumplen hoy 122 años, les recordaron cómo es tradicional junto a estudiantes, trabajadores, combatientes y pueblo en general.
En la evocación a los defensores de la dignidad y la justicia social, Calixto Santiesteban Ávila y José Enrique Remón Domínguez, primer secretario del Partido y presidente de la Asamblea del Poder Popular en el municipio, respectivamente, distinguieron a los miembros de la Asociación de Combatientes de la Revolución Cubana en el territorio, por el aniversario 25 de su creación y su incondicionalidad con la Patria, e igual cuantía de hombres y mujeres de varias generaciones ingresaron a la organización para reafirmar su voluntad de permanecer en las primeras filas de lucha.
La convicción de otros héroes, los médicos de batas blancas, que salvaguardan la vida sin importar las circunstancias, retumbó con el orgullo de misión cumplida en la voz de la doctora Galia Porro Cruz, en representación de los colaboradores manzanilleros que integraron el programa Más Médicos en Brasil: “otros herederos del decoro, médicos cubanos que hemos dejado huellas de humanismo y amor, porque nadie puede apagar el brillo y honor de quienes somos diferentes”.
Enardecidos por las notas del Himno Nacional que interpretó la Banda de Concierto Municipal, y confiados del paso firme y mirada serena de los estudiantes de la Escuela Militar Camilo Cienfuegos, los manzanilleros ratificaron que “como dijera Maceo la libertad se conquista con el filo del machete, que los derechos no se piden y los principios jamás se negocian”.
Las generaciones de cubanos que escribieron páginas de heroísmo y ofrendaron sus vidas por un bien mejor siguieron su legado, expresó Idania Fonseca Guerra, vicepresidenta para el Consejo de la Administración en Manzanillo. “Les rendimos tributos cuando mantenemos levantada y firme la bandera que ellos defendieron, cuando contribuimos con nuestro apoyo solidario a pueblos que lo necesitan”.
El eco evocador a los héroes llegó también hecho canción, en los pétalos de las flores depositadas en su honor, en la remembranza al indiscutible líder de la Revolución Cubana, Fidel Castro Ruz, que enseñó a los cubanos el valor de la solidaridad y el humanismo.
