
Manzanillo. Enero 22.- Para deleitar a los clientes con uno de los platos típicos de la región y símbolo culinario e identitario de la ciudad del Golfo de Guacanayabo, la Lisetera Cayo Confite abrió sus puertas desde el medio día de este martes, con mayor confort y una imagen aún en proceso de transformación.
La emblemática unidad gastronómica de la urbe vuelve a engalanarse con el aroma del pescado frito y el sabor único de la liseta en sus variedades, junto a la brisa del mar; y recibió hoy a los manzanilleros anhelantes de sentir el crujir y exquisito gusto de este y otros productos marinos.
“La necesidad del pueblo de disfrutar de los servicios de Cayo Confite, lugar insigne para Manzanillo que nos identifica en el país entero, nos lleva a reabrir sus puertas antes de concluir el proceso constructivo”, significó Ariel Naranjo Guerrero, su administrador.


El plato de la casa, la liseta, se oferta en el salón principal y el reservado de la unidad, con 11 mesas para cuatro comensales cada una. Ambos espacios resultan más acogedores tras la reparación, acondicionados “el reservado con dos toneladas de clima, y el primero con ocho toneladas, mejor ambientación y la disposición de un moderno equipo de música y televisor pantalla plana para el disfrute de los clientes en el salón, la renovación de la cantina y esperamos la inclusión de la piña colada en el servicio de coctelería”.
En la cancha inicial, bajo la sombra de los techos que simulan las olas del mar y con el frescor inundado de salitre, se disponen18 mesas, y un servicio de comida completa, que incluye arroz congrí o con pescado, viandas, ensaladas, y pescado frito, filete, rueda de sierra, enchilado de camarón o langosta, para corresponder a los diferentes gustos.



Cada uno de los espacios dispone de su cocina, dotadas con nuevos equipos de cocción que al unirse con los antes existentes agilizan el servicio; una tercera cocina dará respuesta a las ofertas del área de asados, en espera del mobiliario. Además, se cuenta con nuevas vitrinas expositoras, neveras, fueron reparados los servicios sanitarios de la unidad con cinco baños para los clientes y trabajadores, y se incrementó una cámara de frío o congelación de cuatro toneladas para mantener fresco el pescado.
Unos 40 trabajadores son responsables hoy con la atención a los clientes, los cuales, asegura Naranjo Guerrero, “trabajamos por el compromiso con el pueblo de un mejor servicio, de cambiar y ganar en calidad, en detalles como la inclusión en las cartas menús el listado de precios y los gramajes, acorde a la ley de protección al consumidor, para que no haya lugar al engaño”.



Héctor Gómez, director de gastronomía en Manzanillo, enfatizó que “hoy después de una transformación de más de un millón de pesos invertidos, es un orgullo abrir sus puertas. Para respaldar sus ofertas la unidad cuenta con la empresa comercializadora pesquera de la urbe Codisman, y el abastecimiento de alrededor de una tonelada de lisetas para su expendio, que junto a las otras especies marinas posibilitan la diversidad de platos”.
Una vez concluida la reparación, que incluye la terraza del segundo nivel para prestar servicios de coctelería, la entrada de otra parte del mobiliario e incremento de capacidades en la cancha, el área para los asados, los cocineros, dependientes, cantineros, deberán atender las solicitudes de 360 comensales en cada vuelta.
La reapertura del servicio en la Lisetera Cayo Confite se realiza como parte de un plan de acciones de la Empresa Municipal de Gastronomía en saludo al Día del trabajador gastronómico, que se celebra cada 4 de febrero, sector que en Manzanillo integran más de 1870 hombres y mujeres.
Que buena noticia, aunque todo lo que se inaugura sin estar terminado despúes son los despúes, ojala y la terminen toda es un esperado regalo, ahora a cuidarlo!!!
MAGNIFICO EL TRATO TANTO DEL RESEVADO COMO DEL ÁREA EXTERIOR