Manzanillo. Octubre 15.- La producción de alimentos es una tarea a la que hoy en Cuba se le está brindando toda la atención para paliar los efectos del bloqueo económico comercial y financiero que enfrentamos, y poder garantizar la obtención de los productos que se necesiten para la vida cotidiana.
Muchas son las iniciativas que se trazan para lograr la conciencia en los pobladores de cada territorio cubano, para que se sumen a las convocatorias lanzadas a sembrar en cualquier espacio posible, incluyendo los patios.
Uno de los manzanilleros que tiene hoy importantes logros en estos propósitos, sobre todo en la apicultura, es Mariano Suárez Tamayo, trabajador de la Unidad Empresarial de Base (UEB) Zoocriadero de cocodrilos de Manzanillo, quien puede transmitir sus experiencias que le han llevado a simultanear sus labores con la producción de miel, llegando a convertirse en uno de los mejores apicultores del territorio.
Este éxito le ha permitido también asociarse a la Cooperativa de Créditos y Servicios (CCS) Paquito Rosales Benítez de la zona de Guasimal en este municipio. Mariano no sólo ha conquistado su espacio en la obtención de la miel, sino que ha aprovechado su patio para sembrar viandas como la yuca y boniato, así como la crianza de animales.
«Desde el 2012 hasta la fecha he mantenido una producción estable de miel y propóleo, pero también en los últimos tiempos me he insertado en la siembra de algunos cultivos varios con un único objetivo, sembrar y producir para el país.
Este año cumplí el plan de producción de miel y propóleo, y lo sobrecumplí con unos 800 kilogramos por encima de las cuatro toneladas comprometidas.
Esta cifra va a aumentar con mis aportes pues todavía me faltan las producciones a recoger en este mes de octubre, noviembre y diciembre.
En cuanto a la cera todavía no he cumplido lo pactado, pero pienso sobrepasar la cifra trazada para este período.
En mi patio hay sembrado además yucas y boniatos. Cuando logre las cosechas pienso entregar algunas de estas producciones en donación a alguna casa para ancianos de Manzanillo.
Todo esto lo he logrado con mucho trabajo, pues el tiempo lo comparto con mis responsabilidades en el Zoocriadero de cocodrilos, y de campesino y apicultor.
Además de las siembras me dedico a la crianza de animales, también en mi patio tengo cerdos lo que favorecerá igual a mi economía familiar.
Estos logros los he alcanzado gracias a la tradición familiar que he tenido, pues soy natural de El hombrito, comunidad de Buey Arriba. Mis padres vinieron a finales de 1985 a vivir a Manzanillo y desde entonces me he dedicado a trabajar la tierra acá.
Quiero transmitirle un mensaje a los demás que quieran seguir mi ejemplo, que produzcan y entreguen lo que puedan de sus cosechas al estado porque eso es beneficio para todos, para garantizar la comida de cada ciudadano», concluyó Mariano.
