Por la visión de nuestros pacientes trabajamos a pesar de las dificultades

Servicio de oftalmología en el hospital Celia Sánchez Manduley de Manzanillo //Foto Eliexer Pelaez Pacheco

Manzanillo. Octubre 14.- La doctora Yenisel López Caballero es una de esas jóvenes apasionada por su profesión, tanto, que se entrega cada día con la mejor sonrisa a los pacientes que llegan al hospital Clínico Quirúrgico provincial Celia Sánchez Manduley de esta urbe, para mejorar el estado de la visión o por alguna dolencia relacionada con su especialidad.


Ella ahora transita por el tercer año de su residencia en oftalmología y se prepara para la presentación en los próximos días de su tesis que le validará su grado científico.


Por la manera de proyectarse y entablar una conversación se puede distinguir la nobleza que le caracteriza, esa cualidad le permite sobreponerse también a las dificultades que encuentra en ocasiones para ejercer mejor su trabajo y elevar la calidad de vida de los pacientes manzanilleros, debido a una injusta ley que golpea a todos los cubanos.


Es el inaceptable bloqueo económico, comercial y financiero que el gobierno de los Estados Unidos mantiene por más de seis décadas a Cuba, y que cada día se fortalece con el único propósito de hacer flaquear a nuestro pueblo y rendirlo de hambre, necesidades y desesperación. Una medida que también provoca sensibles daños al servicio de oftalmología en el país.

Dra. Yenisel López Caballero //Foto Eliexer Pelaez Pacheco


«Una de las principales afectaciones a los pacientes por el bloqueo en nuestra especialidad se evidencia en la parte quirúrgica por el déficit de recursos que tenemos para enfrentar las cirugías, entre ellas la de catarata que es la más afecta a la población.


Para esta operación presentamos muchas escasez de insumos como las lentes que requieren los pacientes, instrumentos como el bisturí, el cuchillete, otras sustancias como la solución viscoelástica, entre otras.


La falta de estos recursos en todo el país provoca que exista el atraso de los pacientes pendientes a cirugía de catarata. También presentamos otros elementos como la falta de anestesia en un momento dado que influye además para las cirugías como la de pterigion u otras más pequeñas», detalló esta doctora.


El impacto de esta medida extraterritorial contra nuestro país, igual afecta sentimentalmente tanto al paciente como al equipo médico pues, «es triste porque para el oftalmólogo lo principal de sus servicios es que el doliente recupere totalmente la visión, hay otros que por su patología no lo podrán lograr pero que esos recursos nos podrían ayudar.

En el caso de la catarata que es la más frecuente simplemente con estos medios los pacientes agradecen mucho que recuperan la visión rápido con la implantación de un lente intraocular. Realmente a nosotros nos provoca mucha tristeza no poder ayudarlos con esta situación aunque hacemos todo lo humanamente posible para mejorarle la salud», expresó la doctora.


En este servicio también se ve afectado el mantenimiento de los equipos que se usan para la atención a los pacientes, tras las roturas o la no adecuada reposición por la imposibilidad de contar con las piezas de repuesto para los arreglos necesarios.


«Sí, igual se sufre cuando tenemos los equipos rotos, como por ejemplo nuestro excimer láser, algo necesario para tratar las patologías refroactivas que sufre la población como las miopías elevadas, las hipermetropías, este medio hace aproximadamente tres años no está funcionando por el déficit de un gas que lleva esa máquina y realmente por el bloqueo no lo tenemos a nuestra disposición», explicó López Caballero.


La doctora agregó que casi siempre gracias a la labor de los electromédicos se pueden resolver algunas de estas roturas por el ingenio y la creatividad que ponen a la hora de resolver algún problema que se les presenta en la institución.


«Estos especialistas resuelven mucho la situación, por ejemplo rescatan constantemente las lámparas de hendiduras que constantemente presentan problemas porque llevan muchos años de servicio y ellos logran arreglarlo, al igual que los oftalmoscopios que hace mucho tiempo no entran nuevos acá, sólo contamos con dos».


Ella en todo el tiempo de labor tiene muchos elementos para demostrar cuanto perjudica a los cubanos ese injusto bloqueo en su especialidad, incluso lo vive como residente de la misma, «nos afecta en el aprendizaje nuestro pues, a menos que hagamos una rotación cuando terminamos, por ejemplo en el Pando Ferrer un instituto nacional con mayor adelanto, pues en nuestra provincia hay cosas que no podemos estudiar precisamente por el déficit y las roturas de nuestros equipos que contábamos con ellos pero se han ido desgastando y no se han podido sustituir», expresó Yenisel.


Entonces si pudiéramos disponer con la posibilidad de adquirir los recursos en naciones más cercanas, incluyendo en los propios Estados Unidos, sin necesidad de tener que hacer gastos excesivos con terceros países no tendríamos tantas dificultades.


«Sería un logro importante para la salud de nuestros pacientes y para nuestra propia superación como médicos. Así se ayudaría a mejorar esa salud ocular que tanto es necesaria desde los niños, que también es importante la oftalmología pediátrica y que igual sufre déficit, hasta la de los adultos mayores.


Indudablemente el bloqueo sí nos afecta, pienso que si esa medida acabara tuviéramos un mejor desempeño y nuestros pacientes pudieran alcanzar una mejor salud ocular», manifestó la doctora.


Hoy es el Día Mundial de la visión, fecha decretada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) conjuntamente con el Organismo Internacional de Prevención de la Ceguera (IAPB), para concienciar a las personas sobre los diferentes tipos de afecciones visuales, es también una oportunidad para que los cubanos le mostremos al mundo cuánto daña a nuestro país ese bloqueo que no permite la posibilidad de un tratamiento mejor.

Aún así nos crecemos ante las dificultades y seguimos brindando los servicios lo mejor que podemos para el bienestar de nuestro pueblo.