Manzanillo. Junio 17.- La proyección comunitaria se consolida como pilar esencial en la formación de los futuros profesionales de la salud. Bajo esta premisa, estudiantes de medicina de la Facultad de Ciencias Médicas de Manzanillo realizaron una intervención comunitaria en zonas vulnerables del municipio, reafirmando el compromiso social que distingue al sistema de salud cubano.
«Conocer de cerca, mano a mano y codo a codo, las necesidades de nuestra población es fundamental para construir un profesional revolucionario y humanista», destacó Raynol Sánchez Ramírez, presidente de la Federación Estudiantil Universitaria de la casa de altos estudios médicos de esta ciudad. La actividad, desarrollada este fin de semana buscó no solo diagnosticar problemas de salud, sino también fortalecer el vínculo entre la universidad y la comunidad.
Entre las acciones realizadas destacó la búsqueda activa de síndrome febril una medida clave para la detección temprana de enfermedades infecciosas. Además, los futuros médicos impartieron charlas educativas sobre prevención, promoviendo hábitos saludables y conciencia sanitaria entre los residentes.
El intercambio directo con la población permitió a los estudiantes aplicar sus conocimientos en contextos reales, mientras recogían inquietudes y necesidades específicas de la zona. «Esta es la verdadera esencia de la medicina cubana: no esperar a que el paciente llegue al consultorio, sino ir a su encuentro», expresó el líder estudiantil.
La jornada reafirmó el principio revolucionario de que la salud no es un privilegio, sino un derecho de todo el pueblo. Los organizadores recordaron las palabras de Fidel Castro, quien siempre defendió una medicina preventiva, accesible y profundamente vinculada a las comunidades.
Con hashtags como #FCMTransformaYCrece, #CubaPorLaVida** y #UnidosXCuba, la actividad fue compartida en redes sociales, donde recibió el reconocimiento de usuarios que valoraron el esfuerzo de los estudiantes y su alineación con los valores del sistema de salud público cubano.
Esta intervención demuestra que la Revolución se construye día a día, formando profesionales con conciencia social, capaces de transformar realidades y honrar el legado de una medicina al servicio del pueblo. La universidad médica granmense sigue así su camino: formando no solo médicos excelentes, sino también ciudadanos comprometidos con su patria.