
Con la arrancada, este domingo, del central Dos Ríos del municipio santiaguero de Palma Soriano, la provincia indómita comenzó la fabricación de azúcar crudo, con un plan «que asciende a 20 811 toneladas, superior a los de las pasadas contiendas y que exige el mayor compromiso y exigencia tanto en el campo como en la industria», dijo a Granma Henry Domínguez Busto, director adjunto de la Empresa Agroindustrial Azucarera (EAA) homónima.
El ingenio, será el único que producirá el endulzante para la canasta familiar normada, ya que el Paquito Rosales, de San Luis, tiene como misión la meladura, «aunque no renunciamos a procesar azúcar, siempre y cuando las condiciones lo permitan», acotó Alexeis López Cervantes, director de la EEA sanluisera.
En ambos emplazamientos ha sido determinante el concurso del movimiento de innovadores y racionalizadores, el Forum de ciencia y técnica en el centro y de varias entidades del Grupo Empresarial AZCUBA. En el caso del central palmero, se incorpora a la contienda con el propósito de dejar en el pasado los incumplimientos y hacer del uso racional y eficaz de los recursos humanos, materiales y financieros un pilar de su gestión. La centenaria industria también elaborará derivados de la caña, como mieles y alcoholes, y con sus turbogeneradores pretende autoabastecerse de energía y aportar al Sistema Eléctrico Nacional.