Manzanillo. Febrero 16.- Este sábado concluyen los jóvenes universitarios de la sede pedagógica Blas Roca Calderío de la Universidad de Granma la semana de impacto social en la que, fuera de las aulas, contribuyeron al desarrollo sostenible de la sociedad manzanillera, con su participación en tareas de primer orden.
La higienización en el litoral manzanillero, específicamente en el área donde los habitantes de la urbe acuden a disfrutar de sus aguas, fue una de las más trascendentes acciones, para acentuar la responsabilidad de todos en el cuidado y protección del medio ambiente por el bienestar común.
Hasta allí llegaron estudiantes y docentes de la Facultad de Educación Media, integrada por las carreras de Geografía, Biología, Química, Matemática, Física, Inglés, Español-Literatura y Marxismo-Historia, quienes realizaron una limpieza de la zona costera con la recogida de desechos sólidos, no biodegradables.
Bajo la premisa de una “guerra al plástico”, los muchachos y muchachas se concentraron en la recogida de objetos de materiales de plástico, que invade las zonas costeras a nivel mundial y suponen un 80 por ciento de la contaminación marina, no se descomponen fácilmente y son confundidos por los peces con posibles alimentos, con repercusión nociva para la salud humana.
Los integrantes del proyecto extensionista Costa Viva de la Cátedra de Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Blas Roca, junto a su presidenta Susel Alejandrez Jiménez, lideraron la actividad a sabiendas de la relevancia de este ecosistema para los habitantes de la región.
La jornada sirvió para promover la conciencia entre estas nuevas generaciones y los vecinos del lugar, pues reducir el aporte de contaminantes para proteger los mares y costas depende del aporte de todos. Hicieron énfasis en que además de dañar el medio ambiente, la basura marina causa perjuicios económicos a actividades como el turismo, la pesca y el transporte marítimo.
Fue relevante también porque la zona costera de Manzanillo tomó un interés turístico tras la llegada del primer mega yate a principios de enero, y constituye a su vez, una franja priorizada por la Tarea Vida como plan del Estado cubano para el enfrentamiento al cambio climático.
De esta forma, los jóvenes de la Universidad de Granma, principal centro científico y tecnológico de esta provincia oriental, demostraron la relevancia de esta semana de impacto social para la sociedad y la necesidad de que se desarrollen acciones como estas de manera sistemática por el bien de la humanidad.
Fotos cortesía de Alina González Menéndez
