Útiles por más de 20 años en el acercamiento de variados servicios a la población, la red de quioscos comercializadores en divisas de distintas cadenas es sometida a un proceso de reordenamiento en la provincia, que no significa el cierre definitivo de todas las instalaciones, sino la mejora de su infraestructura, muy deteriorada en la mayoría de los casos.
A partir de ese concepto, buscan alternativas como la entrega y adaptación de locales en buen estado constructivo para convertirlos en tiendas de cercanía, o nuevos terrenos en los cuales puedan llevarse a cabo inversiones a mediano plazo.
En el caso de los correspondientes a Tiendas Recaudadoras de Divisas (TRD) Caribe, Alberto Meireles, director general de la División en Artemisa, explicó que disponen de 175 instalaciones, entre complejos y unidades comerciales, pisos de venta y quioscos diseminados en la provincia.
De ellos, 44 poseen estructuras modulares o metálicas (20 de galbamec, 20 de cometal y 4 carros móviles), que se desactivarán de acuerdo con un cronograma de ejecución contemplado desde el segundo trimestre de 2017 hasta finales de 2018.
Según Meireles, la estrategia persigue primero la sustitución de los más apartados y vulnerables; algunos por haber sido víctimas de hechos vandálicos o por la mala calidad de su estructura. Siempre deben priorizar la venta a la población en lugares alejados.
Para 2017 tienen concebido el cierre de 18, entre ellos Uvero en Güira; y Santa Cruz, Placita 1 y Quiosco Centro Trasval en San Cristóbal. Este último desaparecerá, pues se encuentra muy cerca de una tienda de Cimex y del mercado de TRD abierto 12 horas.
De igual modo experimentarán cambios debido a su deterioro La Loma y La Villa, el último ubicado en el centro recreativo Guajaibón, de Caimito; Guanajay y La Taconera, ambos en la Villa Blanca; El Centro, Pastorita y Toledo en Artemisa; y Olas del Caribe y Bauta, pertenecientes a esta localidad.
Meireles aseguró que los gobiernos locales así como la Asamblea y la Administración Provincial, trabajan de conjunto con TRD, en la búsqueda de locales subutilizados para convertirlos en pequeñas tiendas que posean mejores condiciones.
En algunos lugares como Baracoa y Rosa Marina, en Bauta; Orozco, en Bahía Honda; Zayas, en Mariel; y en Caimito, se han cedido instalaciones para estos fines, mientras en San Cristóbal y otros municipios, buscan alternativas que son evaluadas en las administraciones para su posible aprobación.
Prevén incluir dentro del plan de inversiones correspondiente a 2018, la construcción en lugares donde no existe posibilidad de entrega de locales.
Hasta la fecha TRD recibió 25 espacios y ha retirado cinco quioscos en la provincia. Contemplan 10 posibles inversiones, algunas a ejecutar con la Contribución Territorial al Desarrollo Local. Cuentan con siete pendientes de solución y tres cerrarán definitivamente a partir de su cercanía con unidades comerciales: El Centro y Santa Cruz, en San Cristóbal, y La Plaza, en Artemisa.
Cimex también se actualiza
Ya en 2016, la cadena de tiendas Cimex sustituyó cuatro de estos puntos de venta por tiendas confortables para trabajadores y clientes, con la modalidad de autoservicio, confirmada como garantía de mayores ventas, ya que el usuario puede seleccionar mejor su mercancía en los estantes, sin que medie la gestión del dependiente.
En Bauta los quioscos de Los Mangos, Cangrejeras y Los Cocos, y el punto de venta de Alquízar, conocido como Los Alemanes, disfrutan de una sólida estructura de mampostería y placa. Los establecimientos comercializan en la actualidad productos de aseo, alimentos y equipos electrodomésticos que antes no podían expender a causa del poco espacio y del débil sistema de seguridad.
Yelennis González, jefa de inversiones de la Sucursal Cimex en Artemisa, señaló que este año se sustituirán los 30 quioscos en mal estado.
La intención de la cadena de tiendas consiste en lograr que las Administraciones Municipales cedan algunos espacios necesitados solo de remodelación y mantenimiento, con tal de ponerlos a funcionar lo antes posible.
Afirmó que ya les han otorgado los permisos para ejecutar en 2017 los quioscos de Vereda y Ceiba en Caimito, y los de La Matilde, Las Mangas, Barrio Obrero y Cayajabos, en la capital de la provincia.
Comenzó el trabajo en La Boca, en Mariel, y en Ocasión, el conocido Rapidito artemiseño, en Calle 31, entre 48 y 50, en tanto esperan que las Administraciones Municipales y Planificación Física otorguen las microlocalizaciones y las licencias de construcción para el resto de las inversiones. El Punto de Venta de Cayo La Rosa, correspondiente a Bauta, está casi terminado. Los seis hombres a pie de obra ya hicieron el baño, el pantry y el área de venta. En el momento de nuestra visita concluían la cerca perimetral y debían terminar el enchape de la meseta, colocar el piso y pintar.
“El mal estado de los quioscos nos ocasiona gran cantidad de mermas en los productos. Además, no resultan seguros. Al cerrarlos, los gobiernos asignarán lugares para la comercialización de productos, sobre todo en aquellas zonas muy alejadas del pueblo”.
González apuntó también que ningún municipio quedará desprotegido. Todos poseen como mínimo dos servicentros y dos tiendas grandes, y algunas extenderán su horario de trabajo en aras de satisfacer la demanda de la población. Estas medidas han de responder a muchas preocupaciones populares.
Los nuevos comercios tendrán baños para los trabajadores, un pantry y se beneficiarán de equipos de frío imprescindibles en la conservación de alimentos.
Todos estos constituyen cambios necesarios enfocados en el bienestar de la población y de los trabajadores de estos establecimientos, que tanto facilitan nuestras vidas y acercan la mercancía a su destinatario. Cambios para mejorar, para dar un salto en cuanto a calidad en el servicio y satisfacción, un binomio indispensable de cara al pueblo.
(Tomado de El Artemiseño)