La Guaira, Venezuela. —La solidaridad voló este domingo de Maiquetía a Puerto Príncipe, con 30 toneladas de alimentos, medicinas y agua potable destinados por el gobierno de Venezuela, en auxilio al pueblo de Haití, asolado por una nueva tragedia.
Según la agencia de prensa rusa, Sputnik, al cierre de esta edición ascendían a cerca de 1300 los muertos en el pequeño país del caribe, sacudido por un sismo de 7, 2 en la escala de Richter, intensidad superior a la registrada 11 años atrás por un fenómeno similar, del que Haití aún no se recupera.
El grueso de las víctimas se localiza en el sector suroccidental y los departamentos de Nippes y la Grand’ Anse (gran ensenada). Hay reportes de más de 3 000 heridos, miles de hogares derribados y daños severos en infraestructuras, incluidas instituciones de la salud, en localidades como Jérémie (Jeremías) y Les Cayes (Los Cayos).
Un cuadro así, le agrega dramatismo a la cadena de infortunios iniciada semanas atrás, con el asesinato de Jovenel Moise y la inestabilidad resultante. La tragedia en las próximas horas pudiera aumentar su escalada de destrucción y muertes, si se consuma la amenaza de Grace, tormenta tropical con lluvias y vientos, en camino hacia La Española.
«Que la solidaridad de todos pueda aliviar las consecuencias de la tragedia», dijo al respecto el papa Francisco en su misa dominical, e instó a que el mundo participara. Un día antes, movida por lo único que le sobra: generosidad, la Venezuela agredida y bloqueada resolvió ayuda «para el auxilio de los afectados por el terremoto en Haití».
