Con la guardia en alto

“Con la guardia siempre en alto”, esta es la premisa de la mayor de las organizaciones de masa existente en nuestro país,  los Comités de Defensa de la Revolución (CDR), por idea de Fidel se crearon el  28 de septiembre de 1960, en La Habana, con el papel de desempeñar tareas de vigilancia colectiva frente a la injerencia externa y los actos de desestabilización de la naciente Revolución .

Es la más poderosa de las organizaciones cubanas gubernamentales, la que agrupa a todos los ciudadanos de esta isla mayores de 16 años de edad. Siempre activa y combativa, dispuestos sus integrantes a enfrentar cualquier tarea asignada por la dirección de la Revolución.

Su estructura es centralizada; cada cuadra tiene su propio CDR, y sus presidentes conforman  a su vez el CDR del barrio, el de la provincia y el nacional, así desde la base también se dirige porque es  una fuerza organizada en favor de la defensa del socialismo.

En el Comité de cada cuadra se realiza el mantenimiento de edificios, la limpieza de calles, la separación de los residuos para su reciclaje, la activación de mecanismos para el ahorro energético, el patrullaje nocturno,  la entrega de sangre para los hospitales, la lucha y vigilancia contra posibles infiltraciones de paquetes de drogas por los mares que rodean la isla de Cuba, la incorporación de los jóvenes al estudio y el trabajo, y la atención a familias con desventajas sociales o ancianos desamparados.

Tuvo en sus inicios el encargo y la participación activa en la Campaña Nacional de Alfabetización y la realización de vacunaciones contra la poliomielitis y otras enfermedades, ahora sigue contribuyendo con el bienestar social en las brigadas de autofocal desarrolladas con el fin de combatir el surgimiento de focos de vectores como los de Aedes Aegyptis responsables de la transmisión de  enfermedades.

En realidad esta organización de masa llega al corazón de los miles de  cubanos y cubanas que la integran con el orgullo de ser útil ante el llamado de la dirección del país, servirle a la sociedad socialista que hemos construido con esfuerzo y tesón.

Hoy cientos de cuadras manzanilleras  se iluminaran con la fogata que cocinará la tradicional caldosa, que espera el aniversario 57 de esta organización de todos, desde los más pequeños hasta los más ancianos apoyarán este empeño de barrio para hacer una fiesta a la altura y siempre “con la guardia en alto”.