Manzanillo. Septiembre 17.- En el marco del aniversario 61 de la fundación de los Comités de Defensa de la Revolución (CDR), las direcciones municipal y provincial de la mayor organización de masas en Manzanillo y Granma, impusieron hoy la medalla Por la Defensa del Barrio a una destacada manzanillera.
La condecorada fue esta vez Nilda Rafaela Lameda Rodríguez, una de las fundadoras de los CDR en este territorio y quien ha dedicado toda su vida a defender la unidad del barrio y las conquistas de la Revolución y el socialismo.
La distinción fue impuesta por Reinier Beltrán Sánchez y por Yamisleydis Ramírez Rosabal, miembros del Comité Municipal del Partido Comunista de Cuba (PCC) en Manzanillo y del Secretariado Provincial de los CDR respectivamente.
Al recibir la condecoración Nilda Lameda afirmó que «esta medalla es para mí casi una sorpresa pues yo soy de las que trabajo por amor no para recibir reconocimientos, por eso siento que en esta medalla están reflejadas tantas personas que trabajaron en el barrio y ya no están físicamente, eso es lo que veo en esta distinción que no es mía es del barrio.
También la dedico a todos los presidentes de los CDR de nuestra zona que llevan años frente a la base de la organización», dijo Hilda.
El momento fue preciso para que la joven cederista Ana María Barbán Villareal pronunciara el llamamiento a la celebración del aniversario 61 de los CDR.
«Los CDR fueron creados por Fidel para salvaguardar, con la participación popular, la libertad de la Patria, la Revolución, y las conquistas del socialismo, enarbolando como principal arma la unidad y el legado de nuestros héroes y mártires, para defender al precio que sea necesario la tranquilidad ciudadana y el derecho de todos a vivir en paz.
Los cederistas somos la gran mayoría del pueblo, vivimos por igual en campos y en ciudades, en repartos residenciales y en barrios humildes con mayores problemas sociales; hacemos las mismas colas, sufrimos los mismos apagones, padecemos las mismas carencias… pero nos une el compromiso de defender a toda costa la Revolución desde nuestras comunidades.
Jamás nos pondremos de rodillas ante un imperio que por casi 60 años nos ha sometido al bloqueo más criminal de la historia, precisamente con la esperanza de rendirnos por hambre, necesidades y desesperación. Sabemos que nos queda mucho por hacer para lograr edificar la Cuba que anhelamos, la que soñaron Martí y Fidel, la que merecen nuestros hijos.
Somos herederos de aquellos mambises que lucharon contra una potencia imperial, y esa sangre mambisa que corre en nuestras venas nos llama a defender la Revolución, con la misma entrega con la que seguiremos trabajando para solucionar nuestros problemas, para reforzar la labor social y llegar al corazón de aquellas comunidades donde existen dificultades, para escuchar las quejas legítimas de nuestros compatriotas y para lograr que nuestra sociedad sea cada vez más justa e inclusiva.
Nadie dude que, como dijera Martí: «En Cuba son más los montes que los abismos: más los que aman que los que odian», dijo Barbán Villareal.
El homenaje se realizó en el CDR número dos de la zona 19 donde vive la condecorada, y hasta allí también llegó Luis Manuel Góngora Hernández, coordinador de la organización en Manzanillo, acompañado por miembros de su secretariado y de la dirección nacional de los CDR, mientras que el arte en esta ocasión lo regaló el solista Ariel Alberto quien se sumó a este agasajo que forma parte de la jornada de celebración aquí por el 28 de septiembre.
