El mundo conmemora este 16 de septiembre el Día Internacional de la Preservación de la Capa de Ozono, para festejar la firma en 1987 del Protocolo de Montreal, considerado el acuerdo mundial más exitoso en materia ambiental.
La denominada Capa de Ozono es una franja de gas muy frágil que protege la vida en el planeta de los efectos nocivos de los rayos solares y está en peligro por el uso durante años de determinados productos químicos, entre ellos potentes sustancias de efecto invernadero.
Un artículo publicado en la revista Nature, en 1974, de los científicos Sherwood Rowland y Mario Molina, alertó que los gases conocidos como clorofluorocarbonos (CFC), utilizados en la industria de la refrigeración y los aerosoles, podían destruir las moléculas de ozono en la estratosfera.
Ello significaba que el llamado escudo protector de la vida en la Tierra, localizado en la parte superior de la atmósfera, entre 12 y 50 kilómetros de altura, estaba expuesto a agotarse de manera progresiva, y dejar de cumplir su vital función de evitar que la radiación ultravioleta del Sol llegue en altas dosis al planeta.
Años después, investigadores británicos verificaron en una de sus bases de observación en la Antártida que los valores de ozono estratosférico eran inferiores a los normales durante el invierno austral, datos corroborados mediante imágenes satelitales.
Dicho hallazgo marcó la aparición del término Agujero de Ozono y condujo a la firma, en marzo de 1985, del Convenio de Viena para la Protección de la Capa de Ozono y del Protocolo de Montreal, el 16 de septiembre de 1987, dirigido a la eliminación gradual de las sustancias agotadoras de la Capa de Ozono.
Un esfuerzo internacional conjunto permitió la eliminación o reducción del uso de dichas sustancias nocivas y en la actualidad se redujo considerablemente la radiación ultravioleta del Sol que llega al planeta, para proteger la salud humana y los ecosistemas.
Hay, sin embargo, un ozono considerado dañino, que se encuentra en exceso en la superficie terrestre y es perjudicial para los seres vivos.
Este año se trabaja sobre el tema Protocolo de Montreal: reparar la capa de ozono y reducir el cambio climático.
Se destaca la Enmienda de Kigali que facilitó la eliminación gradual de los hidrofluorocarbonos (HFC) y la mejora de la eficiencia en el sector de la refrigeración.
La adopción del Protocolo de Montreal demostró que la cooperación es la vía para conseguir avances reales en materia medioambiental.
Según el Panel de Evaluación Científica de dicho acuerdo, la capa de ozono va en camino de recuperarse y probablemente para 2066 recupere los niveles de 1980 sobre la Antártida.
La Capa de Ozono es una franja de gas muy frágil que protege la vida en el planeta. Foto: Prensa Latina.
En video, datos sobre la Capa de Ozono
Declaran instalaciones turísticas avileñas libres de sustancias agotadoras del Ozono
Se extendió el reconocimiento a las entidades que adoptaron medidas para suprimir el uso de SAO. Foto: Román Romero López.
La declaración de seis instalaciones hoteleras como Libres de Sustancias Agotadoras del Ozono (SAO), a propósito de celebrarse este sábado el Día Mundial para la Protección de la Capa de Ozono, confirma el compromiso del sector del turismo en la provincia de Ciego de Ávila con un desarrollo sostenible.
Rafael Pérez Carmenate, delegado territorial del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (Citma), extendió reconocimientos a las entidades que adoptaron medidas para suprimir el uso de SAO, estímulo que antecede el que otorgará próximamente la Oficina Técnica de Ozono (Otoz).
En la provincia avileña resultaron agasajadas las instalaciones Rueda, Pullman Cayo Coco y Kempinski Cayo Guillermo, pertenecientes a los grupos hoteleros Cubanacán, Gran Caribe y Gaviota, respectivamente; además de Aparthotel Azul, La Casona y Villa Gregorio, centros de alojamiento administrados por la cadena Islazul.
Yudelkis Consuegra Becerra, especialista en Gestión de la Calidad del Hotel Rueda, subrayó que ejecutaron inversiones y gestionaron la compra de equipos de clima y refrigeración cuyos gases no contaminan, además de fomentar el uso de fuentes renovables de energía.
Inaugurado el 15 de diciembre de 2015 y con una capacidad de 566 habitaciones, el Hotel Pulman Cayo Coco contempló desde sus inicios el empleo de acondicionadores de aire y equipos de refrigeración amigables con el entorno; en casos de daños o roturas, sustituyen con similar tecnología.
Michel Balmaseda Ávila, especialista en Gestión de la Calidad en esa instalación del destino turístico Jardines del Rey, aseguró que los dispositivos en funcionamiento no utilizan SAO, de manera que también se ajustan a las disposiciones de Accor Hotels, compañía francesa bajo la cual operan con la firma Pullman y promotora de una industria del ocio responsable con la naturaleza.
Libia Polín García, especialista de la Subdelegación de Medio Ambiente de la Delegación Territorial del Citma en Ciego de Ávila, destacó que desde el año 2020 más de 10 entidades avileñas han sido declaradas libres de SAO y se evidencia el interés de otras por sumarse a ese movimiento que garantiza la prevalencia de la vida en el planeta Tierra.
En el año 2022 -recordó- la Otoz reconoció el empeño de entidades adscritas a la Sucursal Extrahotelera Palmares (Parador La Silla, Restaurante La Redonda, Ranchón Playa Flamenco y el Delfinario de cayo Guillermo) y al Hotel Grand Muthu Cayo Guillermo, entidades que eliminaron el uso de productos químicos clorinados, brominados o fluorinados en equipos de climatización y refrigeración.
Polín García refirió que las celebraciones por la referida fecha están dedicadas a resaltar los logros del Protocolo de Montreal, firmado en el año 1987, y al cual se han sumado con posterioridad otras normativas globales que aseguran la preservación de la Capa de Ozono, estructura natural protectora contra las radiaciones ultravioletas.
Argumentó en el territorio avileño se convocó un concurso de creación infantil con pioneros de la Enseñanza Primaria, quienes desarrollaron sus obras durante una actividad de educación ambiental efectuada, de manera reciente, en el Parque Zoológico de la Ciudad de los Portales.
El Panel de Evaluación Científica del Protocolo de Montreal confirmó avances en la recuperación de la capa de ozono y se espera que en el año 2066 los niveles de ozono sean similares a los registrados durante 1980 sobre la Antártida.
Al prohibir las SAO y permitir que esa barrera natural se restablezca de forma progresiva, el mencionado tratado protege a millones de personas contra el cáncer de piel y las cataratas oculares, además de salvaguardar los ecosistemas y ralentizar el cambio climático.
En medio de un calentamiento global que aumenta la necesidad de equipos de climatización en hogares, centros de trabajo e instituciones públicas, se requiere ampliar el acceso a una cadena de frío sostenible, lo que significa la búsqueda de alternativas seguras y respetuosas con el medioambiente para sustituir los hidrofluorocarbonos.
(Con información de Prensa Latina)