Pueblo cubano recuerda este martes al héroe de la independencia de nuestro país, Henry Reeve, El Inglesito, en ocasión de los 144 años de su caída en combate.
A los 19 años, en 1969, el joven nacido en Nueva York viajó la mayor de las Antillas para incorporarse a la gesta independentista contra el dominio colonial español iniciada en octubre de 1968.
Inmediatamente después de su llegada a las costas del oriente cubano, cayó prisionero junto a otros combatientes, y sufrió la pena de fusilamiento en masa; sin embargo, los cuatro impactos de bala recibidos durante la ejecución no fueron mortales y escapó.
Después de reponerse a sus heridas, se incorporó a las fuerzas del general Luis Figueredo y posteriormente se sumó a las tropas libertadoras encabezadas por el Mayor General Ignacio Agramonte, una de las figuras cimeras de la primera gesta independentista nacional.
Los llanos del centro-oriente fueron escenario de las numerosas hazañas del Inglesito, como le decían en las tropas mambisas.
Tras su muerte en combate en la localidad de Yaguaramas, en la actual provincia de Camagüey, el cuatro de agosto de 1876, con solo 26 años, un grupo de patriotas cubanos escribió a la madre del combatiente internacionalista un carta donde resaltan la valía moral y guerrera del estadounidense que amó a Cuba como a su patria.
Más de un siglo después de su desaparición física, su nombre aún hace historia y es símbolo de la solidaridad internacional.
En el 2005, en respuesta al huracán Katrina, Cuba reunió a mil 586 de sus médicos para ofrecer asistencia a Estados Unidos y aunque el entonces presidente George W. Bush rechazó la oferta, el líder de la Revolución Fidel Castro creó el Contingente Internacional Henry Reeve, en honor a su memoria.
Desde entonces ese equipo, especializado en situaciones de desastres y graves epidemias, brinda su colaboración médica en numerosas naciones y por su labor humanista durante la pandemia de Covid-19, organizaciones internacionales piden que se le otorgue el Premio Nobel de la Paz.
Pese a la campaña de descrédito impulsada desde Washington contra la colaboración médica cubana, desde el inicio de la emergencia sanitaria global, Cuba ha enviado 45 brigadas Henry Reeve a 38 países y territorios, con tres mil 772 integrantes, según datos oficiales.
Hoy, esos profesionales de la salud de la honran las palabras de Fidel, quien sobre el Contingente expresó: «Ustedes, con su respuesta rápida y sin vacilación alguna, dispuestos a cumplir el deber en nuevas y difíciles condiciones, están escribiendo una página en la historia de la solidaridad entre los pueblos».