Un total de 3 141 sismos se registraron en el territorio nacional desde el 1ro. de enero hasta el 30 de junio de este año, 1 584 de estos en la zona de Pilón-Chivirico, específicamente al sur de la localidad de Uvero, municipio de Guamá, provincia de Santiago de Cuba, aseguró a JR el Doctor en Ciencias Enrique Diego Arango Arias, vicedirector técnico del Centro Nacional de Investigaciones Sismológicas (Cenais).
El especialista destacó que 11 de los fenómenos reportados fueron perceptibles para la población y el mayor de estos, sentido en toda la región oriental de Cuba, con afectaciones a viviendas en varias localidades de la provincia de Granma, tuvo lugar el 17 de enero, con una magnitud de 5,8 grados.
Precisó que a la zona de Pilón-Chivirico, la más «energética» del país, le siguen en actividad los sectores de Santiago-Baconao (994) e Imías (134). Pilón-Chivirico y Santiago-Baconao resultan las áreas más dinámicas de la falla Oriente, al sur de esta región.
En 2016, según un reporte del Cenais con fecha del 3 de enero de 2017, se registraron 5 756 terremotos en el territorio nacional. De esos 61 fueron perceptibles, y se localizaron en la región oriental.
La actividad sísmica más importante ocurrida el año pasado se ubicó entre enero y febrero, al suroeste de la ciudad de Santiago de Cuba, específicamente en el sector de Mar Verde, donde ocurrieron 1 454 sismos entre el 17 de enero y el 18 de febrero, 38 de los cuales fueron perceptibles.
Nuestro país, explicó Arango Arias, está situado en una zona límite de placas, sobre todo en la parte suroriental. Este hecho aumenta las probabilidades de ocurrencia de un sismo de mayor intensidad en los próximos años, por lo que urge continuar trabajando en pos de la disminución de vulnerabilidades, principalmente en los territorios de mayor actividad y riesgo sísmico.
(Con información de Juventud Rebelde)