Cuba y la República Árabe Saharaui Democrática (RASD) celebraron hoy el aniversario 40 del establecimiento de las relaciones diplomáticas, lo cual fortalece los lazos de amistad entre ambas naciones.
«Los pueblos cubano y saharaui son hermanos, los unen nexos estrechos, y en estos 40 años los vínculos históricos y lazos culturales estarán más consolidados», afirmó el embajador saharaui acreditado en la isla, Melainine Etkana.
También agradeció a Cuba por la solidaridad y el apoyo que siempre brinda con la Revolución y su pueblo en materia de cooperación y fraternidad en varios sectores sociales.
El diplomático resaltó que la mayor de las Antillas ha demostrado a lo largo de la historia que tiene la capacidad de resistir, desafiar y tener éxitos, y para la isla deseó triunfos y logros venideros.
Cuba ha graduado en escuelas cubanas desde 1977 a casi cuatro mil estudiantes saharauis en el sector de la salud, y colabora en el envío de brigadas médicas a los campamentos de refugiados.
Señaló al respecto, que siempre han tenido una brigada cubana permanente de salud y otra de educación en los campamentos saharauis, donde existe una escuela con el nombre de Simón Bolívar, derivado de un acuerdo entre Cuba, Venezuela y la RASD.
Por su parte, la viceministra de Relaciones Exteriores de Cuba, Anayansi Rodríguez, destacó la resistencia del pueblo saharaui, la voluntad y determinación para continuar hasta alcanzar el derecho a su independencia total.
Recordó las palabras del líder histórico de la Revolución Cubana Fidel Castro al expresar del valor de la resistencia de los saharauis y del apoyo que ‘se nos debe dar’, siempre al tato de los pueblos hermanos.
El Sahara Occidental, ubicado al norte de África es uno de los 17 territorios no autónomos bajo supervisión del Comité Especial de Descolonización de Naciones Unidas.
Fue inicialmente colonia española, el proceso independentista se interrumpía en 1976, tras la invasión de Mauritania y Marruecos, país este último que persiste en la ocupación de facto aunque la soberanía marroquí sobre lo que ese reino llama sus «provincias meridionales» no es reconocida ni por la ONU ni por ningún país del mundo.
(Tomado de Prensa Latina)