Este jueves comenzará en la capital camagüeyana el ensayo clínico Ismaelillo con la vacuna Abdala, el cual se realizará en dos fases e incluirá a niños de tres hasta adolescentes de 18 años de edad, para luego aplicar el inmunógeno a esta población infantil en Cuba.
Luego de análisis previos correspondientes sobre el estado de salud de los menores, el esquema de vacunación será de tres dosis cada 14 días, por vía intramuscular y se aplicarán dos formulaciones con potencias diferentes (25 microgramos y 50 microgramos), explicó la Doctora Sonia Resik Aguirre, investigadora principal de los estudios con la vacuna Abdala en el país antillano.
La fase I del ensayo comprenderá a niños de 12 a 18 años seleccionados según los criterios de inclusión, además del consentimiento informado de sus padres y el asentimiento de los adolescentes de participar.
Para la semana siguiente está prevista la segunda etapa del ensayo fase I, que abarcará a niños de tres a 11 años, tras el permiso que debe emitir el Centro para el Control Estatal de Medicamentos, Equipos y Dispositivos Médicos (CECMED), al igual que en el caso de la fase II, la cual será más grande, dijo la experta.
Afirmó que las dosis de la vacuna Abdala -primera desarrollada en América Latina-, para el ensayo Ismaelillo ya están en Camagüey, se cuenta con los recursos necesarios, el personal de salud recibió entrenamiento y capacitación, así como los equipos integrados por personas de experiencia y un grupo de monitores.
Resik Aguirre, científica del Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí, auguró éxito al proceso cuyos resultados se darán a conocer en octubre y favorecerán extender la aplicación de Abdala a la población infantil en toda Cuba.
La Doctora Zurina Cinza Estévez, monitora principal del ensayo clínico Ismaelillo, comentó sobre los rigores éticos y metodológicos que tiene en cuenta el estudio, en el cual participa un Comité independiente de monitoreo de datos, compuesto por profesionales altamente calificados y externos a los sitios de investigación y al Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB), desarrollador de Abdala.
Con la ayuda de los profesionales e investigadores agramontinos, refirió la especialista, Ismaelillo se efectuará bajo estricta vigilancia de las buenas prácticas clínicas que requiere, a fin de probar su efectividad en infantes de las edades mencionadas.
El ensayo clínico prevé cubrir alrededor de 600 niños, lo cual permitirá mayor seguridad en el resultado final, y se elegirán muchachos residentes en áreas urbanas cercanas a los policlínicos de la capital camagüeyana, donde con este propósito funcionarán nueve vacunatorios.