Detrás del pronóstico del tiempo (+Fotos)

El Insmet dispone de 68 estaciones meteorológicas y de ocho radares para la vigilancia de la situación meteorológica en el país. Foto: Ariel Cecilio Lemus

En el año 2016, justo cuando el huracán Matthew azotaba el oriente cubano, Osniel Armas Forteza, licenciado en Meteorología, comenzó su vida laboral, y este acontecimiento fue el impulso para iniciarse en el Centro Nacional de Pronósticos, en el Instituto de Meteorología (Insmet), ubicado en la capital.

Tanto él –que lleva unos cinco años de labor y hoy es especialista superior– como el resto de los jóvenes que trabajan actualmente en diferentes departamentos del Instituto de Meteorología, tienen historias por contar y comparten el mismo amor por el oficio.

El doctor José Rubiera Torres dio fe de ello en conversación con Granma. Consideró que el relevo está garantizado en cualquiera de los puestos en los que las nuevas generaciones aporten al instituto, a lo largo del territorio nacional.

Es que el Instituto de Meteorología, con sus nueve centros nacionales y sus 14 centros provinciales, que cubren la situación meteorológica de todo el país, constituye una escuela para quienes tengan el honor de ser parte, y le brinda a la sociedad no solo el pronóstico del tiempo, así lo explicó el doctor Celso Pazos Alberdi, director general de esa entidad.

El Insmet es un sistema nacional que se compone, además, por 68 estaciones meteorológicas, ocho radares y una instalación en la Zona Especial de Desarrollo Mariel, que realiza la vigilancia del tiempo y del clima, y se encarga de otros estudios asociados con la agrometeorología y temas medioambientales, etcétera.

Cada uno de los diferentes centros nacionales, subrayó, aportan a la elaboración de los pronósticos del tiempo y climáticos para brindarlos al Gobierno, a la población y a la economía.

En este esfuerzo es fundamental la integración con organismos de la Administración Central del Estado y la sociedad civil. Mencionó, por ejemplo, el vínculo con el Estado Mayor Nacional de la Defensa Civil, el Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos y el Instituto Cubano de Radio y Televisión (ICRT).

POR DENTRO EL CENTRO NACIONAL DE PRONÓSTICOS

Específicamente, el Centro de Pronósticos tiene entre sus tareas darle la información final al pueblo y a las autoridades sobre la situación meteorológica y ante cualquier fenómeno peligroso, explicó su directora, la doctora Miriam Teresita Llanes.

Acerca de las interioridades del trabajo, dijo que el equipo está compuesto por el jefe de turno, un segundo y varios especialistas. La juventud es la fuerza mayoritaria.

Desde hace muchos años se trabaja con el pronóstico extendido hasta diez días, y se realiza una vigilancia que permite, hasta con más de 72 horas de antelación, emitir los avisos de alerta temprana.

Estos últimos se hacían solo para el Gobierno y la Defensa Civil, pero actualmente lo más acertado es hacerlos públicos. Por eso, recientemente lo hemos puesto a prueba, de manera que no cree una falsa alarma, pero sí permita prepararnos con antelación para cualquier circunstancia, como ocurrió recientemente con la tormenta tropical Elsa, acotó.

Al respecto, el doctor José Rubiera añadió que la emisión de los pronósticos al pueblo, aun cuando no sea por ciclones tropicales, tiene ese propósito esencial de transmitir la mayor cantidad de información posible, para que se adopten las medidas pertinentes. Por eso, aprender a comunicar también es parte del trabajo de los meteorólogos cubanos, puntualizó.

«Existen incomprensiones con los pronósticos que emitimos, pero la Meteorología no es una ciencia exacta, hay una probabilidad de cumplimiento. Miramos varios modelos, trabajamos en conjunto, para dar un producto final que es colegiado, incluso, con los especialistas de las provincias», explicó la doctora Llanes.

Adelantó que la actual temporada ciclónica será activa, porque existen las condiciones para ello, y recomendó estar alertas todo el tiempo, fundamentalmente por nuestra ubicación geográfica.

LA ACTIVIDAD CIENTÍFICA: OTRA FORTALEZA DEL INSMET

El trabajo del Insmet no termina con el pronóstico del tiempo o el seguimiento a un fenómeno natural. El máster en Ciencias Antonio Vladimir Guevara Velazco, director científico del instituto, resumió la amplia actividad científica en la que participa todo el sistema meteorológico nacional.

En este 2021, destacó, se gestionan 48 proyectos de investigación, repartidos en programas nacionales, sectoriales y territoriales, además de proyectos no asociados, como los empresariales.

De acuerdo con el directivo, participan en programas nacionales como el relacionado con la adaptación y la mitigación al cambio climático, el de desarrollo energético y el de envejecimiento, longevidad y salud.

Otra línea fundamental está en los servicios científico-técnicos para los cuales el Estado asigna financiamiento.  «Tenemos ocho servicios funcionando este año, seis son tradicionales, como el pronóstico del tiempo, climático, meteorología marina, etcétera. Los otros dos son encargos en determinadas áreas importantes para la economía nacional».

Ejemplificó con el que se presta a la Zona Especial de Desarrollo Mariel, donde hay una estación de nuevo tipo, con integración de actividades como el pronóstico del tiempo, la meteorología marina y la contaminación del aire. Indicó que se le presta servicio sistemático a los intereses de la zona.

La inventiva de quienes laboran en el Insmet alcanza hasta para resolver las situaciones internas del sistema, como las dificultades con la tecnología.

En efecto, al decir de Guevara Velazco, muchos de los sistemas de vigilancia o el instrumental funcionan gracias al aporte de los especialistas, técnicos e ingenieros que le dan vitalidad.

Por ejemplo, la innovación en los radares meteorológicos ha permitido, inclusive, la exportación de esos servicios a otros países del área. Igualmente ha sido útil en la red de estaciones, que tiene más de 50 o 60 años, algunas hasta cien, y en el tránsito hacia la tecnología avanzada.

Ciertamente, el trabajo del sistema meteorológico nacional, desde 1965, con la fundación del Insmet –no importa si es a través de la investigación en tiempo real con los pronósticos, o con los proyectos que se plantean cada año– proporciona toda la información necesaria que permite velar por la seguridad de las vidas humanas y reducir las pérdidas de bienes materiales ante fenómenos peligrosos; e incluso, perfecciona el propio servicio y contribuye al desarrollo científico de la Meteorología en el país.

Foto: Ariel Cecilio Lemus
Foto: Ariel Cecilio Lemus
Foto: Ariel Cecilio Lemus
Foto: Ariel Cecilio Lemus
Foto: Ariel Cecilio Lemus
Foto: Ariel Cecilio Lemus