Donde se dibuja un gesto de amor y Educación

¡Buenos días! ¿Cómo está seño?- saluda Kimberli Charlote- y le extiende el puño en señal de cortesía, ella sabe que cada detalle cuenta, que todo cuidado es poco ante la actual amenaza de un enemigo invisible que obliga a cambiar de hábitos y gestos de amabilidad.

La “seño”, que ahora tiene unos pocos de los pequeños que normalmente atiende, le enseña con mucho esmero las normas higiénicas y sanitarias para vencer este virus letal; es que así son las educadoras de los círculos infantiles, siempre prestas a saciar a los infantes en edades preescolar de conocimientos y patrones de conductas que les serán útiles en la vida futura.

Se tiene especial cuidado en las normas higiénico sanitarias. //Foto Lilian Salvat Romero


Kimberli, junto a otros que suman alrededor de 150 niños que asisten en este tiempo de pandemia a estos centros educativos de la ciudad del Golfo, cumple a cabalidad con lo aprendido en su plantel Alegría Infantil, ubicado en el reparto Nuevo Manzanillo de esta urbe costera, también acuden pequeños pertenecientes a otros seis más de los diez que cuenta este territorio.

Kimberly Charlote .//Foto Lilian Salvat Romero


La situación epidemiológica actual, precisó agrupar a los que realmente necesitaban asistir debido a que sus madres cumplen tareas vitales para la población; Zaida Mesa Fonseca quien funge como jefa del departamento de la primera infancia en la dirección municipal de Educación aquí, destacó que en este municipio solo están acogiendo a los pequeños dos centros de este tipo, en los que se reubicaron todos los que asistirían en este período.

Zaida Mesa Fonseca, jefa del departamento de la primera infancia en la dirección municipal de educación aquí.//Foto Lilian Salvat Romero


“Además de este, en el que nos encontramos y Amiguitos de Camilos, situado en las alturas de la ciudad, son los encargados de recepcionar a los infantes cuyas madres que debido a su responsabilidad en su centro laboral no les fue posible acogerse a la resolución que les garantiza el 60 por ciento de su salario en esta etapa o al teletrabajo; se reubicaron de manera provisional, de acuerdo a su lugar de residencia.

«Actualmente asisten no más de 150 niños de los mil 765 que son matrícula de estas instituciones infantiles, los que cuentan con educadoras muy responsables, las que ponen todo su empeño y esfuerzo para lograr que cumplan con todas las habilidades del desarrollo que deben ir adquiriendo por etapa.

«Esta responsabilidad se hace mayor por todo lo que implica un descuido de cualquiera de las medidas dictaminadas por las autoridades sanitarias, ellas velan y exigen porque cada chico cumpla lo establecido”.

Yunelis Rodríguez García, directora del círculo infantil Alegría Infantil de Manzanillo.//Foto Lilian Salvat Romero


Yunelis Rodríguez García, directora del círculo, explica cómo se organiza el trabajo en estos momentos: “en esta etapa con todos los requerimientos de la pandemia, hemos elaborado un sistema de trabajo acorde a las medidas para contrarrestar la COVID-19, donde continuamos trabajando en la preparación de los docentes, las familias y nuestros niños, apoyándonos además en la parrilla televisiva que ofrece el Ministerio de Educación a través de los canales nacionales educativos, asimismo seguimos con el tercer perfeccionamiento educacional en el cual estamos enfrascados con el fin de alcanzar el máximo desarrollo de los pequeños de cero a seis años de edad y prepararlos para su ingreso a la educación primaria; para lograr este empeño las educadoras les brindan un grupo de actividades para seguir consolidando los conocimientos y crear en ellos hábitos y habilidades.

Con el uso obligatorio del nasobuco, los pasos podálicos, el lavado frecuente de las manos, la desinfección de superficies y juguetes, de forma diaria, hemos logrado hasta el momento no tener que lamentar ningún incidente relacionado con enfermedades respiratorias”.

Kimberly, cuida de su higiene personal.//Foto Lilian Salvat Romero


Kimberlin sabe que debe hacer para no ser contagiada no solo de la Covid-19, también de las enfermedades trasmitidas por el mosquito Aedes Aegyptis, «mi seño me enseñó a cambiarme el nasobuco cada tres horas, a lavarnos siempre las manos antes de llevarla a la cara y mantener todo bien limpio, así el mosquito no te picará, él trae muchas enfermedades al hombre, es necesario cuidarnos todos y quedarnos si podemos en casa y no salir a hacer visitas”.

La seño María de la Caridad Vargas del Toro se enorgullece de su trabajo.//Foto Lilian Salvat Romero


María de la Caridad Vargas del Toro hace más de 14 años que se desempeña como educadora de círculo infantil y siente mucha satisfacción con lo que hace, “siempre me gustaron los niños, el trabajo con ellos llena el alma y satisface, ellos rejuvenecen el espíritu y a su vez aprenden, de esta manera nos divertimos; nuestra principal labor además de cuidar de ellos es enseñarle.

«En estos tiempos de coronavirus la responsabilidad se acrecienta, los padre depositan toda su confianza en nosotros para poder cumplir con sus tareas, esperan que estén tan seguros como cuando lo están con ellos y es que eso somos sus otros padres y madres”.

Hoy se festejan seis décadas de que se materializara esta genial idea del Comandante en Jefe Fidel Castro y de la eterna heroína Vilma Espín, y los niños manzanilleros como Kimberlin pueden contar con esta opción que dibuja en el corazón de cada uno un gesto de amor, educación y comprensión.

Ya son 60 abriles de victorias, que se festejarán con fiesta, globos y alegrías, en la que se continuará haciendo Revolución sobre la marcha.


“¡Cuídate mucho!- advierte la menor de cinco años – nos vemos en la próxima – se despide- recuerda cumplir con las medidas de higiene y nunca te enfermarás”.

A los pequeños se les inculca el amor al trabajo //Fotos Lilian Salvat Romero