Manzanillo. Octubre 24.- Los más de cinco mil 876 trabajadores del sector de la educación en Manzanillo han mantenido un papel significativo durante la batalla a la COVID-19, desde marzo y hasta la actualidad.
Con diferentes iniciativas los miembros de esta rama asumieron importantes tareas y decisiones para garantizar el cuidado y protección de los educandos en primer lugar, y de sus propios obreros.
El Máster en Ciencias Pedagógicas Yunior Heredia Tamayo, director de Educación en Manzanillo, al hablar sobre el tema resaltó cómo emprendieron las misiones, se propusieron metas objetivas y los retos que tendrán a partir de ahora con la nueva normalidad una vez que inicie el período lectivo que ya se avecina el dos de noviembre.
– ¿Cómo se comportó el sector de la educación en las etapas anteriores del enfrentamiento a la COVID-19 en el municipio?
– Lo primero que hicimos fue cumplir con la medida indicada por el Ministro de Educación (MINED) de establecer el trabajo a distancia y la programación televisiva tanto para los docentes, como para estudiantes.
En un segundo momento comenzamos a realizar labores de apoyo a personas vulnerables. Para la tarea ubicamos un total de 296 trabajadores en función de garantizar el servicio en conjunto con el Sistema de Atención a la Familia (SAF) diseñado por nuestro país.
Luego nos incorporamos a trabajos agrícolas donde vinculamos a obreros de varias instituciones educativas en los polos productivos que tiene el municipio, ubicados en El Caño y en el Sitio Remate, donde laboraron más de 130 profesionales nuestros en esta función.
También nos dedicamos durante el enfrentamiento a la COVID-19 a la protección de los recursos de nuestros centros a partir del acompañamiento y cooperación de los trabajadores y directores, lo que evitó la pérdida de materiales de las escuelas.
– ¿Cómo los maestros y profesores dieron seguimiento a las teleclases que se transmitieron en el tiempo de estricto aislamiento social?
– Comentar que nuestros docentes son muy responsables y entregados a su profesión. A cada uno de ellos se les hizo llegar por diferentes vías las parrillas televisivas que recibimos. La primera fue la que se transmitió de marzo a abril, la segunda de abril a mayo, y la última en junio cuando trabajamos tres semanas.
Los educadores dejaron evidencias de sus sistemas de clases adaptadas a esta situación, desde las anotaciones de las emisiones televisivas en sus libretas de trabajo, para poder aplicarlas en el mes de septiembre cuando se hizo la sistematización de lo que se impartió desde marzo hasta junio.
– Una parte importante que tuvo el sector de educación durante este tiempo fue la posibilidad de formar parte activa del Consejo de Defensa Municipal (CDM). ¿Cuál fue el aporte de ustedes en ese órgano, aún cuando nuestras escuelas estaban cerradas?
– En nuestro caso formamos parte, y encabezamos el subgrupo de educación, cultura y deporte. Todos en conjunto asumimos importantes tareas orientadas también para cumplir con las acciones que le comenté y las asignadas por el CDM, con el objetivo de lograr el cuidado y protección de nuestra población.
Sin lugar a dudas los especialistas del Inder tuvieron una participación activa junto a nosotros pues un gran número de profesionales de los combinados deportivos del municipio se sumaron a todo el sistema de trabajo que le expliqué.
Al igual que los miembros de cultura, todos cumpliendo cada una de las medidas orientadas por nuestros ministerios que por supuesto se unieron y formaron parte de una sola estrategia de enfrentamiento.
– ¿Cuáles serán los retos del sector de la educación en Manzanillo ahora en la nueva normalidad?
– El principal reto que tenemos sin lugar a dudas es contribuir a la formación de un hombre que responda a los intereses de nuestra sociedad.
Para poder lograr eso tenemos que asegurar un inicio del curso 2020-2021 donde se cumplan las estrategias dictaminadas por el Ministerio de Salud Pública (MINSAP), dígase la desinfección de las manos y superficies, el uso del nasobuco, así como el logro del distanciamiento social cumpliendo con nuestro propósito de evitar los hacinamientos.
Nos mantenemos con la creación de subgrupos en cada una de nuestras aulas, continuamos fortaleciendo los horarios escalonados para procesos vitales como el recibimiento de los alumnos, los recesos, el almuerzo en el caso de los centros seminternos e internos, en estos últimos, también en el horario de la comida, y en otros momentos significativos como, en los tiempos de baño y sueño de los becados, acciones que también garantizan la seguridad de la salud de los estudiantes, trabajadores, y por supuesto la de nuestro municipio.