Pinar del Río.-Con el propósito de poner a punto su poderosa maquinaria a poco del inicio de los XIX Juegos Panamericanos Santiago-2023, el equipo nacional de boxeo, considerado el buque insignia del deporte cubano, culmina su preparación en tierra pinareña.
Aunque prefieren no dar pronósticos, en la mente de todos está sacarse la espina de los Juegos Centroamericanos y del Caribe de San Salvador, donde la armada antillana solo logró un par de títulos.
Víctor Sánchez Matos, segundo entrenador de la selección cubana, explicó a Granma que no es la primera vez que el equipo nacional viaja hasta Pinar del Río para prepararse para los torneos importantes.
En esta oportunidad, afirmó que ha sido un verdadero campo de entrenamiento, en el que se han repasado todos los componentes, desde la preparación física general, hasta la técnico táctica.
«El mayor énfasis lo hemos hecho en la parte táctica competitiva, gracias a un equipo pinareño que ha plantado cara. Atleta por atleta ha mostrado resistencia y combatividad, y eso es lo que nos hacía falta a nosotros», afirmó.
Luego de la pobre actuación del boxeo en los últimos Centroamericanos, Sánchez Matos señaló que se ha reconformado el equipo desde el punto de vista psicológico y físico.
Tras una en primera etapa en Francia, en la que se realizaron 23 sesiones de entrenamiento, con seis de sparring, detalló que la estancia en tierra pinareña ha permitido consolidar la preparación integral de la escuadra, para llegar a Santiago-2023 en óptimas condiciones para retener el título Panamericano.
Para el capitán del buque insignia Julio César La Cruz (92 kg) también ha sido una experiencia provechosa. «Hemos hecho una buena ruta crítica, que nos da la posibilidad de llegar en nuestra mejor forma a Chile», aseveró.
En su caso, reconoció que no hay otra meta que no sea la medalla de otro. «Voy en busca de mi cuarta corona panamericana, que me convertiría en el boxeador que más títulos de ese tipo ha ganado en la Historia».