El volcán de La Palma ha dejado de emitir durante unas horas lava y humo, constatando un “descenso de la actividad”, aunque ya vuelve a emitir humo. Durante el breve parón, los científicos y expertos que siguen el proceso ya advertían de que no suponía el fin de la erupción.
“Puede ser que el sistema ha entrado en una pausa para una recarga o que se haya producido un taponamiento del conducto”, indicaba el portavoz del Instituto Volcanológico de Canarias (Involcan), David Calvo.
La actividad ha vuelto a hacerse patente a las 11:00 h (hora local) después de que la emisión de cenizas y humo hubiera cesado a las 8:30 h tras una noche de constantes explosiones.
El Instituto Volcanológico de Canarias, Involcan, acaba de confirmar a través de su cuenta de twitter que el cono principal del volcán vuelve a emitir lava.
Ahora mismo, los expertos están reevaluando datos y estaciones para determinar qué ha sucedido. No se prevé el fin de la erupción porque indicadores como las emisiones de dióxido de azufre seguían ayer muy elevadas –en 25 000 toneladas diarias- y es necesario que estas se reduzcan para dar por concluido un proceso eruptivo. “Las emisiones elevadas y la actividad era vigorosa hasta ahora, pero hay que mirar y reevaluar”, dijo.
La “prioridad” en este momento es la señal sísmica que ha vuelto a intensificarse, pero en otro lado de la isla, al sur, en Fuencaliente (municipio próximo a donde se produjo la erupción de Teneguía en 1971).
En las últimas horas se han detectado varios sismos esta madrugada en este municipio y entre los siete y los 14 kilómetros de profundidad. “Puede ser que haya una migración de magma en el interior de la isla. Que se haya cansado de salir por aquí o tenga dificultad y busque otras zonas más accesibles o que haya una reajuste de la estructura de la isla como respuesta a la salida del magma que había”, ha indicado Calvo, que ha asegurado que en la profundidad de La Palma “hay más magma”. “Que vaya a salir no es seguro pero que hay más magma, sí”, ha subrayado.
Octavo día de erupción en La Palma. Foto: EFE
El volcán de San Juan en la isla de La Palma salió por tres bocas en distintas zonas de la isla en 1949, lo que aumentó su peligrosidad. Según ha señalado Calvo, ahora se está “como al principio del proceso”.
La colada de lava se encuentra en estos momentos a unos 800 metros del mar, con lo que dependiendo de la velocidad con la que transcurra, ha ralentizado su paso, podría alcanzar hoy el océano.
Mientras tanto, vuelven a operar las aerolíneas en la zona. Binter, que realiza vuelos entre las distintas islas del archipiélago, lo hará a partir de hoy a las 13:00 h después de que el viernes por la tarde los suspendiera.