Estados Unidos: Policías admitieron la tortura de dos hombres negros

Las familias de las víctimas torturadas. // Foto: Tomada de periódico 5 de Septiembre.
Las familias de las víctimas torturadas. // Foto: Tomada de periódico 5 de Septiembre.

Seis policías blancos de Misisipi, Estados Unidos, admitieron la tortura de dos hombres negros inocentes con un juguete sexual y pistolas paralizantes, informó  el Departamento de Justicia el jueves pasado.

La Fiscalía federal acusa a los policías de agredir sexual y físicamente a las víctimas esposadas en una redada el 24 de enero en la localidad de Braxton para la que no tenían orden judicial.

Ante un tribunal, los agentes acusados reconocieron que patearon la puerta y accedieron a la casa donde vivían los afroamericanos, los esposaron y detuvieron sin motivos razonables para creer que habían delinquido.

Les insultaron y golpearon, electrocutaron 17 veces y agredieron con un juguete sexual. Además, uno de los policías disparó dos veces para intimidar a las víctimas.

Posteriormente, el ayudante del sheriff Hunter Elward, de 31 años, extrajo una bala de su pistola y forzó su arma contra la boca de uno de los hombres, antes de gatillar. La primera vez, el arma no se disparó.

“Elward cargó la corredera con la intención de disparar en seco por segunda vez. Cuando Elward apretó el gatillo, el arma se disparó. La bala laceró la lengua [de la víctima], rompió su mandíbula y salió por su cuello”, explica el comunicado del Departamento de Justicia.

Los policías no prestaron asistencia médica al herido, que sangraba en el suelo. Se reunieron en el exterior del domicilio para planificar una falsa tapadera y fabricar las pruebas.

Colocaron una pistola al hombre herido, destruyeron grabaciones de vigilancia, casquillos de bala y cartuchos de pistola eléctrica, presentaron al laboratorio pruebas falsas de posesión de drogas, realizaron declaraciones falsas a los investigadores y presionaron a los testigos.

Los seis agentes se declararon culpables de 16 cargos, entre los que se incluyen conspiración contra los derechos, privación de derechos con arreglo a la ley, disparo de un arma de fuego durante un delito de violencia, conspiración para obstruir a la justicia y obstrucción a la justicia.

Todos los oficiales fueron despedidos o dimitieron en las últimas semanas, informó Reuters.

“Los acusados en este caso torturaron e infligieron un daño indescriptible a sus víctimas, violaron atrozmente los derechos civiles de ciudadanos a los que se suponía que debían proteger y traicionaron vergonzosamente el juramento que prestaron como agentes del orden», comentó el fiscal general de EE.UU., Merrick Garland.

La fiscal general adjunta Kristen Clarke, de la División de Derechos Civiles del Departamento de Justicia, afirmó que “ningún ser humano debería ser sometido jamás al tipo de actos de violencia tortuosos, traumatizantes y horribles que llevaron a cabo estos agentes del orden”.

Tres de los acusados, Hunter Elward, Daniel Opdyke y Christian Dedmon, también se declararon culpables el jueves de una acusación por tres delitos federales adicionales en un incidente no relacionado el 4 de diciembre de 2022, cuando uno de ellos golpeó y electrocutó a un hombre blanco y disparó un arma cerca de su cabeza para que confesara, mientras los otros no intervinieron.

Compartir en: