No existe ninguna causa objetiva para las complicaciones del proceso de entrega de visados por parte de los norteamericanos, afirmó el portavoz.
Una declaración de la Cancillería rusa señala que, a causa de las dificultades de las tripulaciones de Aeroflot para recibir los visados, se puede poner en peligro la comunicación aérea entre ambas naciones, pues esa compañía es la única con vuelos directos.
La decisión de la embajada norteamericana de extender a más de 80 días el periodo mínimo de espera para el visado de pilotos y azafatas podría romper el gráfico de los vuelos, indicó la parte rusa.
Washington intentó culpar a Moscú por la extensión del tiempo de preparación de los referidos documentos, tras la expulsión de más de 100 funcionarios de la embajada norteamericana, pero el gobierno ruso recordó que en ningún momento exigió nombres específicos.
A diferencia de listados específicos emitidos por Estados Unidos y países occidentales de diplomáticos rusos que deben salir del país, bajo diferentes pretextos, esta nación solo nombra la cantidad total, pues se trata de medidas de respuesta a expulsiones anunciadas por Occidente.
Los vuelos de otras compañías foráneas de Estados Unidos necesitan hacer escala en naciones europeas para llegar a Rusia.
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