A pesar del ataque que se intentó montar contra Cuba en el Parlamento Europeo, el alto representante de la Unión para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, consideró que el mecanismo de cooperación entre La Habana y Bruselas es un compromiso crítico para acompañar al país en la reforma política, económica y social por la que atraviesa.
Según reporta la Agencia Prensa Latina y otros medios internacionales, los argumentos irrefutables a favor de la Isla fueron más consistentes que las calumnias y difamaciones de un reducido grupo de eurodiputados que responden a Washington. La Unión Europea defendió el Acuerdo Político y de Cooperación con Cuba y criticó el bloqueo estadounidense.
El alto representante del bloque europeo rechazó además el propio hecho de que algunos eurodiputados de la derecha lograran introducir un punto para agredir a Cuba utilizando el tema de los derechos humanos. Aseguró que nadie puede dudar que los derechos humanos son un elemento central del acuerdo entre la Unión Europea y Cuba.
Entre los eurodiputados que rechazaron la iniciativa se encuentra Fernando Barrena, quien instó a continuar y reforzar las relaciones históricas entre Europa y Cuba, y exigió a Estados Unidos el fin del injusto bloqueo de más de 60 años, al tiempo que recordó que esa brutal política ha sido rechazada 27 veces por la Organización de Naciones Unidas.
Por su parte, el eurodiputado Javier López expresó que el Acuerdo Político y de Cooperación permite tener relaciones constructivas, críticas y respetuosas entre las dos partes, a lo cual otros eurodiputados añadieron que no debían dejarse llevar por esa farsa y agradecieron nuevamente a nuestro país por brindarle ayuda a países europeos como Italia, en la peor fase de la pandemia.
En días anteriores, la Comisión de Relaciones Internacionales de la Asamblea Nacional del Poder Popular de Cuba denunció la maliciosa intención de discutir en el Parlamento Europeo sobre «la situación política y los derechos humanos en Cuba».
Era evidente la intención de buscar una Resolución contra nuestro país, tergiversando la realidad. Sin embargo, los argumentos a favor de Cuba prevalecieron, y se hizo justicia frente a los defensores de la mentira y la indecencia.