Manzanillo. Enero 27.-
Yo vengo de todas partes,
Y hacia todas partes voy:
Arte soy entre las artes,
En los montes, monte soy.
José Martí.
Alejada del centro de la ciudad de Manzanillo, en la comunidad rural de El Recreo, se encuentra una pequeña institución que honra la memoria del Héroe Nacional de Cuba.
La escuela primaria rural José Martí es el único centro educativo de este municipio que lleva el nombre del más universal de los cubanos. Aquí estudian 90 alumnos desde el preescolar hasta el sexto grado, que son atendidos por los 23 trabajadores, de ellos 19 están directos a la docencia.
Su directora la licenciada Yamisleidis Fontaine Rivero, confiesa que los trabajadores de este centro saben «honrar el nombre que tiene nuestro centro haciendo actividades en la jornada martiana, restaurando los libros que recogen la literatura del Apóstol, y sobre todo manteniendo la calidad de nuestro proceso docente educativo».
En todas las áreas de este centro se encuentra viva la presencia de Martí, en cada rincón de la escuela aparece su imagen y los adornos que la engalanan están relacionados con la vida y obra del hombre de La Edad de Oro, incluyendo personajes de su literatura. Una de las iniciativas que resalta a la vista es la declaración de cada una de las aulas del centro con nombres de temas martianos. «Todas llevan un nombre vinculado con el Apóstol escogidos del cuaderno martiano como por ejemplo, el aula del preescolar se llama Los zapatitos de rosa, la de segundo grado Nené traviesa, y la del sexto grado Los tres héroes», señaló la directiva.
«Aquí en honor a Martí, todos los destacamentos pioneriles tienen círculos martianos, en la actualidad contamos con 16 se estos grupos», dijo Fontaine Rivero.
Cuando se creó esta escuela sólo existía un pequeño local donde se impartían clases desde el preescolar y hasta el tercer grado, los demás alumnos tenían que trasladarse hasta la primaria Horacio Rodríguez, un centro algo distante de la comunidad.
Felizmente un vecino realizó la donación de su terreno para construir frente a este el otro local que hoy se muestra más acogedor y amplio. «En el 2014 se comenzó la construcción del lugar, y a finales del 2015 quedaba inaugurada nuestra nueva escuela que permite ahora recibir a los niños de esta zona desde el preescolar hasta el el sexto grado», destacó la licenciada.
Principales protagonistas
«Para los niños trabajamos, porque los niños son los que saben querer, porque los niños son la esperanza del mundo».
José Martí
Sus pequeños alumnos, por ser personitas del campo, se muestran algo tímidos por la humildad que les caracteriza, así sólo pude tomarle algunas palabras. Por ejemplo Javier Martínez Aguilar, del sexto grado dice que sus maestros les «imparten buenas clases, yo me siento muy bien con ellos, los adoro mucho, tanto que no sé que voy hacer cuando me tenga que ir para la secundaria básica».
Ángelica Súarez Ramírez es la jefa del colectivo de los pioneros y plantea que «aquí hacemos actividades, aunque por ahora están detenidas por la COVID-19. Para nosotros es un orgullo que nuestra escuela lleve su nombre porque es un héroe muy grandioso que luchó por la independencia de Cuba».
Yimitza Bárzaga Ramírez estudia el quinto grado y dice que para ellos la suerte de que su escuela lleve el nombre de José Martí «significa mucho porque él es nuestro Apóstol y nuestro Héroe Nacional, fue el que luchó por la independencia de Cuba y gracias a él hoy podemos disfrutar de nuestras escuelas. Ahora nos toca estudiar mucho para ser buenos profesionales, y el día de mañana agredecerles a nuestros maestros y a todos los que nos ayudaron aquí en nuestra niñez para tener un buen furturo».
Maestros
«He ahí, pues, lo que han de llevar los maestros por los campos. No sólo explicaciones agrícolas e instrumentos mecánicos; sino la ternura, que hace tanta falta y tanto bien a los hombres».
José Martí.
En el claustro de profesores se puede percibir la modestia y la entrega diaria a esta labor, así por ejemplo Laritza Rodríguez Agüero dice que la escuela en «esta zona rural es muy importante porque nosotros le brindamos conocimientos, no sólo en contenido, sino en ideas marxistas, martianas, y fidelistas.
Aquí tenemos niños con diferentes características las que sobrellevamos, y trabajar con ellos es maravilloso por ser pequeños humildes, sencillos, y ahora recuerdo una frase de Martí cuando dijo, que los niños son la esperanza del mundo, y desde aquí vemos como nuestro país no tiene discriminación con los ciudadanos, por eso los infantes tienen los mismos derechos tanto en el campo como en la ciudad, y así lo cumplió nuestro Fidel cuando fundó las escuelas tanto en el llano como en las montañas», concluyó la maestra.
Por su parte Tomás Pujol Mijares, jefe de ciclo de esta escuelita dice que, el compromiso que tienen los profesores de este centro » es grande por representar a nuestro Héroe nacional. Esta entidad está enclavada en una zona rural con situaciones acorde al lugar, por eso hay que realizar un trabajo comunitario diferente y una atención diferenciada con el aprendizaje de los alummos».
Este profesor que peina algunas canas, al referirse del tratamiento de la figura representativa de la escuela confiesa que, «el trabajo con Martí es sistemático en el dominio de esta figura en nuestros niños. Se le da salida en todas las asignaturas que imparte el maestro y en las actividades complementarias que también desarrolla, cada grupo tiene su acción martiana en las que se puede observar como los niños son capaces de recitar, dibujar y hablar sobre el más universal de los cubanos», refirió Pujol Mijares.
Compromiso
Educar es depositar en cada hombre toda la obra humana que le ha antecedido: es hacer a cada hombre resumen del mundo viviente, hasta el día en que vive: es ponerlo a nivel de su tiempo, para que flote sobre él, y no dejarlo debajo de su tiempo, con lo que no podrá salir a flote; es preparar al hombre para la vida.
José Martí
Llevar la hermosa tarea de la educación en esta escuela requiere de mucho compromiso y entrega por las características de sus alumnos, pequeños duendes con sueños y aspiraciones en los que se resalta la más sublime de las cualidades del alma que es la humildad de las personas de campo.
Por eso su directora confiesa que «tenemos como responsabilidad mantener la calidad de nuestra educación, ampliar las actividades relacionadas con Martí, y el colectivo de trabajadores se propone seguir trabajando y esforzándose por conservar las ideas y enseñanzas nuestro Héroe Nacional».
Así está presente Martí en una escuelita bien distante de nuestra ciudad. Su amor a los niños y a la Patria se ven reflejados en esta obra donde se cosechan sus pensamientos en los corazoncitos de los pequeños que estudian aquí, en un terreno fértil para un futuro mejor.