Manzanillo. Septiembre 4.- Garantizar que la educación sea un escenario que propicie un ambiente favorable para los niños, contribuyendo con seguridad a su formación integral, es uno de los principales retos para el curso 2023 – 2024 que inició hoy en toda Cuba.
Yunior Heredia Tamayo, director de Educación en Manzanillo, puntualizó que en este período lectivo se normaliza pedagógicamente a todos los escolares, luego de las alteraciones a causa de la pandemia que azotó el país, retomando las 46 semanas lectivas, divididas en tres períodos.
Como algo atípico, se inician dos 12 grados, unos 195 alumnos que se graduaron en junio y tienen sus pruebas de ingreso en octubre, y el que comienza ya ajustado a la etapa normal con una matrícula aproximada de 230 estudiantes, que tendrán las evaluaciones para su entrada a la enseñanza universitaria en mayo.
Otro gran desafío para este curso escolar es la aplicación del tercer perfeccionamiento de la educación cubana que abarca segundo y cuarto años de la educación de la primera infancia, primero y cuarto de la educación primaria, séptimo grado de secundaria básica y décimo del preuniversitario, que inician con la Literatura nueva a partir de octubre.
El Máster Alain García Joa, subdirector económico de educación en el municipio, afirmó que ya está garantizada para la primera semana del curso la alimentación en los 32 centros que ofertan tanto para estudiantes como trabajadores, la merienda escolar. En este sentido se continúa recibiendo del lácteo, la avícola, y el cárnico; y se cultivan las 69 hectáreas de tierra en la zona de Jibacoa y Cayo Espino, así como los llamados huertos del cocinero.
En Manzanillo el acto de inicio del curso 2023-2024 tuvo lugar en la escuela primaria Modesto Tirado Avilés, ubicada en la zona rural Ceiba Caridad.
