Ella pensó que nunca la iban a denunciar, pero la Policía fue a detenerla a su casa, tuvo que pagar una fianza para salir a la calle, la procesaron judicialmente y el pasado 7 de diciembre del 2016 el Tribunal Municipal de Plaza de la Revolución la halló culpable del delito de evasión fiscal.
Fue un caso triste, nos narró Martha Monlongo Beltrán, directora de la Oficina Nacional de Administración Tributaria (Onat) en ese municipio de la capital.
Una mujer de 33 años, que ejercía por cuenta propia una de las actividades de venta de alimentos. Dejó de trabajar y de pagar sus impuestos mensuales, no formalizó su baja con la Dirección Municipal de Trabajo ni con nosotros, acumuló 17 mil pesos de deuda tributaria, contó la funcionaria.
“Yo no sabía que esto me podía pasar”, alegó la encartada. Fueron a la Onat a interceder por ella familiares y hasta vecinos. Desde el exterior le enviaron el dinero para pagarle al fisco. La oficina municipal envió un documento a los jueces para aminorar su sanción, pero ya el proceso penal estaba en curso. Era imparable. Obtuvo una pena mínima, pero ya arrastrará consigo por siempre la vergüenza de un antecedente delictivo.
Este fue solo uno de los cuatro casos que la Onat de Plaza de la Revolución llevó a juicio durante el segundo semestre del año pasado. Es una de las 223 denuncias por evasión fiscal que la Administración Tributaria presentó a lo largo de todo el país, 136 de ellas fruto de la labor conjunta desde junio pasado con la Policía Nacional Revolucionaria (PNR), para el incremento de la disciplina ciudadana en materia fiscal.
“Antes la Onat estaba muy sola, pero ahora existe un encadenamiento de las acciones con otros organismos, y hay más respeto”, valoró Sonia Fernández Ramírez, directora jurídica de la Oficina Nacional.
Perfil de un delito ¿inusual?
El delito de evasión fiscal, según el Código Penal, puede conllevar penalizaciones de hasta 8 años de privación de libertad, explicó la jurista. Ya hay personas a las cuales los tribunales impusieron sanciones con rangos entre dos y cinco años, especificó.
Además de las acciones con la PNR, también el Ministerio de Finanzas y Precios —organismo rector de la Onat— firmó un acuerdo de trabajo con el Tribunal Supremo Popular, que permite establecer una interpretación homogénea de esa figura delictiva en el país y conciliar las actuaciones de enfrentamiento en los niveles municipal, provincial y nacional, añadió Fernández Ramírez.
La primera prioridad es localizar a las personas deudoras, ya sea por impagos de las cuotas mensuales o por subdeclaración de sus ingresos, amplió la directora jurídica. También realizamos más de 300 acciones contra quienes ejercen ilegalmente una actividad por cuenta propia, lo cual conlleva una presunción de deuda por el período estimado de trabajo, y multas con el máximo de rigor.
Entre las manifestaciones más comunes de este último fenómeno, amplió, están las personas no inscritas como contribuyentes que son a su vez contratadas de forma ilegal por trabajadores titulares de alguna licencia. En estos casos las sanciones son para ambos, empleado y empleador.
En Arroyo Naranjo durante el segundo semestre del 2016, la PNR localizó a 101 contribuyentes que tenían deudas, y presentamos siete casos de evasión fiscal ante el tribunal, argumentó por su parte Herda Fraga Elejalde, directora de la Onat en ese municipio capitalino.
En la campaña de Declaración Jurada del año pasado en el referido municipio hubo 301 contribuyentes omisos al concluir el período de presentación voluntaria. Además, fiscalizaron en profundidad a 215 de 961 subdeclarantes, ya fuera por el volumen de los ingresos que dejaron de reconocer ante el fisco o por reincidir en esa conducta evasora. De ellos 39 reclamaron la determinación de deuda que les hizo la Onat, recursos de reforma que no prosperaron.
No es un proceso injusto, hay negociación de la deuda con el contribuyente, matizó la funcionaria. Pero lo cierto es que casi siempre le demostramos, con la misma información que nos ofrece, que nadie puede gastar más de lo que ingresa. Precisó Fraga Elejalde, por ejemplo, que algunas personas desconocen su derecho a la exoneración del pago de impuestos durante el tiempo que les ampara un certificado médico, aunque como regla considera que ya la persona sabe qué es evadir al fisco.
Hoy la subdeclaración de ingresos es menor, pero es un comportamiento que siempre existirá. No obstante, ahora el contribuyente vio que sí pasaba algo cuando incurría en esa acción, enfatizó la directora de Arroyo Naranjo, donde el año pasado la Onat cobró más de 4 millones de pesos por deudas fiscales.
Llama la atención que de los siete casos pendientes de juicio por evasión fiscal en ese municipio, cuatro contribuyentes pagaron sus adeudos después de presentar el expediente. Pero eso no detiene el proceso penal en su contra.
No todas las personas conocen que pueden llegar hasta ese punto, añadió, y todavía hay poco conocimiento del tema tributario en los tribunales municipales para llevar a cabo estos procesos, evaluó Fraga Elejalde.
En Plaza de la Revolución, sin embargo, la directora de la Onat refirió que desde la presentación de la denuncia ante la PNR hasta el juicio contra sus cuatro evasores solo transcurrieron dos meses y siete días, con muy buena respuesta también por la Fiscalía y el Tribunal. En estos momentos tienen seleccionados otros 10 casos por presunta evasión fiscal a quienes les van a iniciar el proceso judicial.
Para presentar el expediente por evasión fiscal, son requisitos que consten tres visitas o citaciones de la Onat al contribuyente, el reconocimiento de la deuda por su parte y que no posea bienes embargables para realizar el cobro forzoso.
Arden las barbas del vecino ¿lo ves?
Circe Castillo es una joven tenedora de libros quien lleva la contabilidad del negocio de su esposo, también trabajador por cuenta propia en Arroyo Naranjo desde el 2012, con cinco trabajadores contratados y licencias para mecánica, chapistería, refrigeración, mantenimiento constructivo y soldadura.
Considera justa la política fiscal del país, y por el concepto de la bonificación del 5 % que les correspondió al presentar la Declaración Jurada antes del 28 de febrero, obtuvieron un “ahorro” de unos 34 mil pesos.
Más feliz aún estaba Gustavo Bécquer Martínez, director de programas en Radio Enciclopedia, a quien hallamos en la Oficina Municipal de Diez de Octubre cuando efectuaba el trámite para solicitar una devolución de dinero.
Al hacer los cálculos en su Declaración Jurada de ingresos personales, la cuenta para este contribuyente del sector artístico arrojó que las entidades de las cuales recibió sus pagos durante el año le retuvieron un importe mayor del que debía liquidar como impuesto final. De proceder su solicitud, sería esta la tercera ocasión en que la Onat le repondría esos aportes en exceso.
Como otros contribuyentes que entrevistamos, sin embargo, ninguno refirió conocer de casos de deudores con problemas ante la PNR y los tribunales.
Olivia Rodríguez Mendiola, directora de la Admiministración Tributaria en Diez de Octubre, explicó que las principales conductas evasoras en el trabajo por cuenta propia y otras actividades no estatales ocurren al registrar ingresos mensuales por debajo de lo real, así como la subdeclaración total al finalizar cada año fiscal. También hay incumplimiento de deberes formales que son indicios de ese fenómeno, como no acudir al registro de contribuyentes, o no actualizar los cambios de dirección para que a la Onat le resulte imposible notificar la deuda tributaria al infractor.
Las diferentes modalidades de venta de alimentos, transportación de carga y pasajeros, así como el arrendamiento de viviendas, habitaciones y espacios, son las actividades que más inciden en estas indisciplinas fiscales en el país.
Al fiscalizar la Declaración Jurada del año anterior, hubo una determinación de deuda cercana al millón 400 mil pesos solo en 65 contribuyentes de Diez de Octubre. Es importante que a un 5 % de los casos la PNR los localizó en otras provincias, apuntó Rodríguez Mendiola. Además la gente empezó a venir sola a pagar sus deudas cuando supieron por los medios de comunicación que la Policía los podía citar, argumentó.
La directora de la Onat en Plaza de la Revolución añadió que como parte de la labor preventiva que realizan debe haber un seguimiento sistemático sobre los ingresos que reporta cada contribuyente, para alertarle cuando la actividad no genera los ingresos esperados. Quien subdeclara cada mes, al finalizar el año tendrá una deuda mayor. Nuestra obligación es crear esa percepción de riesgo, dijo.
Aunque en pocas ocasiones, trabajadores por cuenta propia envueltos en incumplimientos fiscales también acudieron al movimiento sindical. Roberto Betarte, jefe del Departamento de la CTC que atiende Asuntos Laborales y Sociales, aclaró cómo en algún caso debieron demostrarle al contribuyente que no le asistía la razón. No obstante, informó que los afiliados de ese sector no estatal en cada sindicato también pueden acceder a los servicios de asesoría jurídica que la CTC contrata en cada territorio con los abogados de los Bufetes Colectivos.
Lo óptimo, sin embargo, siempre será pagar bien y en tiempo, para no llegar a ese temible punto, cuando la Onat te llama.
(Tomado del semanario Trabajadores)