Por una esmerada atención a nuestras adolescentes (+FOTOS)

Manzanillo. Agosto 14.- En Manzanillo como en toda Cuba la atención a la salud integral de los adolescentes y jóvenes es primordial, e incluye su cuidado en la esfera sexual y reproductiva.

Esto se debe a que la adolescencia es una etapa de la vida caracterizada por la vulnerabilidad y el riesgo de exposición a múltiples enfermedades, dada su conducta exploratoria que los exponen a las mismas.

Por eso el sistema de salud de nuestro país se esmera en el cuidado especial a este grupo, sobre todo a las adolescentes embarazadas por el alto riesgo para su salud y del futuro bebé, y las complicaciones que pueden presentar, tanto en el embarazo como en el parto, porque sus cuerpos infantiles aún no están preparados para este importante acontecimiento.

En el hospital provincial Ginecobstétrico Fe del Valle, enclavado en esta ciudad, se tiene especial cuidado en las atenciones a esas muchachas que enfrentan un embarazo y la maternidad, para que lo hagan de una manera responsable.

La doctora Mirtha Johnson Quiñones, jefa del departamento de docencia e investigación de la instalación médica, refirió que «aquí las adolescentes tienen una atención diferenciada que incluye todo su manejo durante el período de gestación, el parto y el puerperio, además de la vigilancia a las infecciones ginecológicas que presentan».

Dra. Mirtha Johnson Quiñones //Foto Eliexer Pelaez Pacheco


«Para sus atenciones existe un grupo integral que lo conforman las psicólogas, promotoras de la educación para la salud, el personal de enfermería, y los médicos especializados en todas las cuestiones de la especialidad, y de otros perfiles más amplios, porque a veces son adolescentes que tiene otras afecciones asociadas y necesitan incluso hasta de pediatras que atienden la parte de ginecología infanto-juvenil, porque ellas se encuentran en las edades pediátricas», señaló la doctora.

«Como este es un centro que lleva la atención secundaria, desde que la paciente ingresa se tiene en cuenta su edad, las características y a ellas, como a todas, se les evalúa como un ente bio-sico-social. En estos casos se le explica todo lo referente al embarazo, al parto, la lactancia materna, ya que muchas no tienen la orientación suficiente sobre estos aspectos».

«Esta atención se le brinda tanto a ellas como a sus familiares, porque hay cuestiones legales en las que intervienen sus padres como tutores principales que tienen que responder por ellos, porque existe un mecanismo que se llama consentimiento informado y son los adultos los que tienen que autorizar cualquier proceder a realizar sobre estas adolescentes».

«El hospital está comprometido con la atención a estas pacientes, porque como pertenecen a un grupo de alto riesgo por la repercusión desde el punto de vista biológico que tiene sobre la salud de ellas, y en la parte social porque son niñas que en un momento han frustrado sus deseos de continuar estudios y superarse; se les hace una evaluación lo más integral posible para lograr que salgan satisfechas al igual que sus familias».

Uno de los médicos que directamente atienden a estas pacientes es el Dr. Héctor Linares Mesa, especialista de primer grado en obstetricia y ginecología, quien trabaja en la sala especializada en atención a las gestantes de muy alto y alto riesgo obstétrico. Este doctor asegura que «a ellas se les brinda una atención diaria que incluyen la aplicación de pruebas de bienestar fetal, complementarios y todo lo referente al cuidado de sus embarazos, con una vigilancia estricta de su estado general, el examen físico, signos vitales de acuerdo a la patología que tengan asociada, y las pruebas variables que son cardiotocografía, perfiles biofísicos, biometría y todas que están a nuestro alcance».

Dr. Héctor Linares Mesa //Foto Eliexer Pelaez Pacheco


«Estas adolescentes son de mucho riesgo porque pueden tener partos prematuros, con restricciones de crecimiento, son pacientes que pueden desencadenar enfermedades hipertensivas en el embarazo, pero de modo general sus evoluciones han sido buenas. Nosotros tratamos que salgan de nuestro hospital con la mayor satisfacción posible, les brindamos orientaciones tanto a ellas como a sus familiares de todos su riesgos y las complicaciones que puedan aparecer».

Cuando todo sale bien con estas pacientes para el Dr. Linares es una inmensa satisfacción porque «como son prácticamente unas niñas, uno las ve como si fueran nuestras hijas y encaminamos nuestras atenciones a ellas como si fuéramos sus padres, ya no como médicos, porque muchas tienen 15 ó 16 años y un poquito más, y uno se siente satisfecho cuando salen del hospital luego de un parto sin problemas, y exentas de complicaciones».

Sin lugar a dudas una de las especialidades que más impacta en estas muchachas es la psicología, pues como esta es una etapa donde se adolesce mucho, necesitan de orientación y ayuda para asumir el embarazo y la maternidad. Una de las especialistas que atienden a estas futuras madres es Merciluz Castañeda Guerrero quien detalló que «una vez que las pacientes ingresan a esta institución por sus características se les brinda una atención diferenciada. Por parte de la psicología se les realizan una entrevista para explorar si la adolescente pudiera tener alguna alteración de nivel psicológico o para lograr que ellas nos conozcan mejor, que sientan que pueden contar con nosotros».

Merciluz Castañeda Guerrero //Foto Eliexer Pelaez Pacheco


«Asimismo atendemos a la familia por la importancia que esto repercute, porque en este período de vida es fundamental el trabajo de la familia y sus apoyos».

«Existe también la Metodología de la maternidad y paternidad responsable que no sólo se trabaja con estas muchachas, sino que se utiliza con cualquier gestante. Esta incluye la preparación desde que la mujer se embaraza, todo el tránsito de su período gestacional por la distintas fases que se van pasando, y una vez que el bebé nace, cuáles son las estimulaciones o logros que deben tener en cada etapa de la vida del recién nacido y posteriormente del niño», dijo la psicóloga.

«Con nuestras atenciones logramos que se porten mejor en el salón de parto, porque las adolescentes vienen y no saben ni cómo se sube a la mesa ginecológica , porque las madres, o por mitos que hay en la sociedad, no las preparan en ese sentido. Igual el resultado se logra por las charlas que se les brindan en las salas donde se les explica todo, incluyendo qué hacer cuando se tiene al bebé en los brazos, lo que las prepara para ser una mejor madre», concluyó Castañeda Guerrero.

Las adolescentes opinan

Conversar con estas muchachas es ver cómo van asumiendo poco a poco su maternidad, el conocimiento que han adquirido y el agradecimiento de las atenciones en este centro hospitalario.
Ellas no son de mucho hablar, pero al menos en sus cortas palabras se transmite el mensaje que están satisfechas con las atenciones y la orientación recibida.

Deylis Bello Rondón //Foto Eliexer Pelaez Pacheco

Así por ejemplo Deylis Bello Rondón paciente de 19 años valora de bien la atención recibida en el hospital. «Acá todos los días velan por mi bienestar, están atentos de mis signos vitales y de mi feto. Me brindan charlas para preparme sobre la importancia de la lactancia materna, el cuidado del bebé y del mío propio. Todo esto es muy importante para mi porque por primera vez voy a ser mamá».

La medialunera Yessi Fuentes Amaya //Foto Eliexer Pelaez Pacheco

Yessi Fuentes Amaya una medialunera de 16 años dice que agradece «la atención recibida aquí porque es muy buena. Me han preparado mucho sobre todo en el cuidado que debo tener en la alimentación para mi bienestar y el de mi bebé».

Otra de las adolescentes es Karen Camila López González, quien se recuperaba de una intervención quirúrgica que le puso fin a su embarazo. Para ella la atención recibida aquí «es buena porque me dieron todo el apoyo que necesito, no he tenido ninguna queja de los médicos y me siento bastante bien. En este tiempo me dieron charlas sobre el proceso del embarazo, las interrupciones y sus complicaciones».

Al lado de Karen estaba su mamá Gladys González Mendoza quien dijo que valora «de bien las atenciones de mi niña, no hemos tenido ninguna preocupación por el proceder que le hicieron por las dedicaciones que han tenido los médicos. Estoy agradecida de que hayan ayudado a mi hija, lo único que les pido es que me la sigan cuidando».

En el hospital provincial Ginecobstétrico Fe del Valle se atienden a las adolescentes hasta los 19 años, con 11 meses y 29 días, tiempo en que ellas son consideradas pacientes pediátricas. Todas sus atenciones y dedicaciones son especiales porque este grupo etáreo, donde el cuerpo no completa su total formación, merece todos los desvelos para que no lleguen a sufrir las lamentables complicaciones que pudieran provocar un embarazo a esta etapa de la vida.

Karen Camila López González //Foto Eliexer Pelaez Pacheco
Gladys González Mendoza, madre de Karen
//Foto Eliexer Pelaez Pacheco
En la instalación médica las adolescentes tienen una atención diferenciada //Foto Eliexer Pelaez Pacheco
Hospital Provincial Ginecobstétrico Fe del Valle //Foto Eliexer Pelaez Pacheco
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Un comentario en “Por una esmerada atención a nuestras adolescentes (+FOTOS)

  1. Bienvenida sea la planificación familiar, amén de la corta edad de las futuras mamás. La familia como eje primordial y esecial de su preparación debe velar por ello de conjunto con la atención primaria de salud en Manzanillo.

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