«En Cuba son momentos de unidad, de trabajo colectivo, y las administraciones tienen que estar cerca de los trabajadores, escuchando, compartiendo los problemas, pidiendo opiniones, y no siempre pasa de esa manera”.
Así reflexionó este viernes el miembro del Buró Político y primer ministro, Manuel Marrero Cruz, en el Pleno del Consejo Nacional de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC), jornada donde la economía estuvo en la mira del debate.
El encuentro, encabezado también por los miembros del Buró Político Roberto Morales Ojeda, secretario de Organización del Comité Central del Partido, y Ulises Guilarte de Nacimiento, secretario general de la CTC, inició con una felicitación especial al General de Ejército Raúl Castro Ruz y a los combatientes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias, en ocasión del aniversario 66 del desembarco del yate Granma.
Marrero Cruz subrayó la idea de crear y mantener en todos los centros laborales del país espacios donde, desde la polémica y la participación, se encuentre la mejor solución a esos problemas que afectan a los trabajadores y a las entidades.
El Jefe de Gobierno insistió en «promover el papel del sindicato para fomentar la aplicación de la ciencia y la innovación en los territorios, y que estas incidan directamente en resultados económicos más favorables a nivel de país.»
El Primer Ministro resaltó cuán vital resultan, en el actual escenario laboral, los cuadros sindicales, como legítimos representantes de los obreros, conscientes de actuar con responsabilidad y compromiso en pos de la diversificación de las ofertas de bienes y servicios a la población.
Precisamente al pueblo transmitió Marrero Cruz un mensaje de agradecimiento «por la confianza eterna en la máxima dirección del país.» Un pueblo revolucionario, dijo, que “lo que quiere es que las cosas se resuelvan dentro de la Revolución y del socialismo. Y jamás le vamos a fallar».
En su intervención, el Jefe de Gobierno abordó, además, las prioridades de trabajo que involucran a los sindicatos, entre las cuales figuran la producción de alimentos, el aporte de la empresa estatal socialista, el enfrentamiento al delito, las ilegalidades e indisciplinas sociales, la función de los nuevos actores económicos como complemento de la economía, y la urgencia en todos los sectores de la aplicación de la ciencia, la informatización y la comunicación, pilares de la gestión gubernamental.