Quienes dirigen tienen que estar en la calle

Foto Estudios Revolución
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Tenemos que escuchar a la gente, reclamó el Primer Ministro, Manuel Marrero Cruz, que encabeza junto al Vicepresidente de la República, Salvador Valdés Mesa, visita de Gobierno a la provincia de Granma.

La batalla por ir eliminando paulatina, pero de forma continua, los problemas acumulados que afectan a la población, no se va a ganar con el Presidente de la República o el Primer Ministro en la calle; se ganará cuando todos los dirigentes, a todos los niveles, estemos en la calle, reflexionó el Jefe del Gobierno de la República, Manuel Marrero Cruz, en la provincia de Granma.

Y tenemos que hacerlo escuchando a la gente y promoviendo la participación de toda la población, que debe plantear, proponer, consensuar prioridades, dar soluciones, participar en ellas, y controlar lo que se hace y fue aprobado por las asambleas municipales del Poder Popular, como ha pedido el compañero Miguel Díaz-Canel, subrayó.

Marrero Cruz encabeza la visita de Gobierno iniciada este jueves a Granma,un método de trabajo de la dirección del país que se retoma tras el impase provocado por la pandemia de COVID-19 en los dos últimos años.

La visita gubernamental a Granma está encabezada también por el Vicepresidente de la República, Salvador Valdés Mesa. Participan, además, los vice primeros ministros Comandante de la Revolución Ramiro Valdés Menéndez, Inés María Chapman Waugh, Ricardo Cabrisas Ruíz, Alejandro Gil Fernández, Jorge Luis Tapia Fonseca y Jorge Luis Perdomo Di Lella, y más de media docena de ministras, ministros y otras autoridades nacionales.

La reflexión del Jefe del Gobierno de la República fue a propósito de la visita al barrio Los Taínos, en Manzanillo, de conversaciones con otros lugareños de la región en el emblemático malecón local, y en el reparto Jabaquito, en Bayamo. En todos los lugares muchos vecinos se le acercaban para plantearle problemas que afrontan ellos y sus familias, principalmente asuntos de vivienda.

Los intercambios con el pueblo fueron combinados en una larga jornada de trabajo del Primer Ministro, que comenzó sobre las 8:30 de la mañana de este jueves y aún continuaba al filo de las 9:00 de la noche.

Fue una jornada seguida, sin detenerse un minuto. Anduvo de Manzanillo a Pilón, de Pilón a Bayamo; por la periferia de las ciudades, por instituciones económicas y sociales, por el mismo corazón de las dos bellas urbes granmenses, cargadas de tantas singularidades e historia gloriosa de la nación cubana.

MANZANILLO SIEMBRA

Marrero comenzó la jornada laboral por el bloque productivo en desarrollo Granma 2, en las cercanías del aeropuerto de Manzanillo, y donde se alistarán varios cientos de hectáreas para el autoabastecimiento municipal.

A nueve kilómetros de la ciudad, es parte de los planes para garantizar en tierra propia y con mano de obra local la alimentación de las más de 128 000 personas que viven en la jurisdicción.

El Primer Ministro indicó diseñar aquí un modelo exitoso de producción que tenga en el centro al hombre. Este programa tiene que nacer bien, donde la gente se sienta estimulada, se apropie de la iniciativa y vaya obteniendo resultados, y con ellos mejorando sus condiciones y calidad de vida, tanto personal como familiar.

El Jefe del Gobierno de la República estuvo acompañado por los viceprimeros ministros Alejandro Gil Fernández —quien se mantuvo junto a él durante toda la jornada de este jueves— y Jorge Luis Tapia Fonseca, además de las principales autoridades provinciales, el primer secretario del Partido en Granma, Federico Hernández Hernández, y el gobernador de la provincia, Francisco Alexis Escribano Cruz, quienes también lo acompañaron en los recorridos.

El polo productivo Granma 2 «se pinta solo» para dar buenas cosechas, se señaló. Está bordeado por tendidos eléctricos, viales, tiene agua, y está «al cantío de un gallo» de Manzanillo.

Para este año aquí se prevé dejar listas unas 600 hectáreas, que al desbrozarle el marabú podrán dar cultivos varios de todo tipo, aunque se priorizarán el plátano y la yuca, además de viandas y hortalizas de ciclo corto, como recomendó Marrero Cruz.

Tierra buena atrás, el Primer Ministro se dirigió al hospital clínico- quirúrgico – docente Celia Sánchez Manduley, inaugurado hace más de 40 años por el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz y que sigue siendo un orgullo de los manzanilleros y todos los granmenses.

Marrero aprovechó la estancia en el hospital, donde lo esperaba el ministro de Salud Pública, José Àngel Portal Miranda, para transmitir un reconocimiento a los trabajadores y trabajadoras de la Salud por el intenso trabajo que han realizado durante dos años de enfrentamiento a la pandemia de COVID-19.

Nuestro personal de la Salud, dijo, ha desarrollado un trabajo lleno de sacrificios, con riesgo para sus vidas, alejados de sus familias. Siempre —agregó— se habla de quienes han estado en la zona roja, pero detrás de esos valiosos compañeros han estado miles de ustedes, enfatizó a representantes del colectivo laboral del Celia Sánchez Manduley.

Los directivos del hospital ofrecieron un panorama detallado de los servicios y resultados de la institución, una presentación que generó un amplio debate sobre los esquemas presupuestarios de los centros de salud al conocerse las principales insatisfacciones de la población y los trabajadores del recinto, mayormente vinculadas al estado constructivo, la infraestructura y los sistemas ingenieros de la edificación, que ya va necesitando «más que una pasadita de manos».

Marrero Cruz compartió con los asistentes al encuentro un amplio ejercicio sobre las maneras en que se asignan los dineros para el mantenimiento y las inversiones en los centros de salud por parte de las autoridades municipales y provinciales, que deben garantizar, entre tantas prioridades, necesidades y los pocos recursos disponibles, la vitalidad y mejoramiento sistemático de estos.

Esta necesidad, sin embargo, solo se asegurará, explicó, si las discusiones sobre los presupuestos se hacen de forma más democrática y participativa, de forma tal que permita decidir colegiadamente las prioridades de una localidad.

Tierra buena atrás, el Primer Ministro se dirigió al hospital clínico- quirúrgico – docente Celia Sánchez Manduley, inaugurado hace más de 40 años por el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz y que sigue siendo un orgullo de los manzanilleros y todos los granmenses. Foto: Estudios Revolución

EN LOS TAÍNOS

En la mañana de este jueves el Primer Ministro también visitó la barriada manzanillera de Los Taínos, donde el delegado de la circunscripción No. 16, Junior Heredia Tamayo, describió los trabajos de reanimación que se realizan en la comunidad.

Los problemas principales se concentran aquí en la vivienda, los viales y el ciclo de abasto de agua, además de otros asuntos que el propio Jefe del Gobierno de la República pudo constatar en un diálogo franco, a veces dramático, con un numeroso grupo de vecinos, fundamentalmente mujeres, sobre todo personas ancianas y adolescentes con uno o varios hijos.

Marrero escuchó atenta y respetuosamente todas las insatisfacciones, a algunas de las cuales gestionó soluciones rápidas. No obstante, insistió en que los factores de la comunidad, con sus líderes a la cabeza, tienen que estar comprometidos con buscar soluciones a los problemas del barrio y sumar a toda la población a la ejecución de esas soluciones.

En la segunda ciudad más grande de Granma, el Primer Ministro también recorrió la Empresa Pesquera Industrial de Granma (EPIGRAN), y a seguido instalaciones gastronómicas del emblemático Malecón manzanillero, como la Liseta y el recién recuperado restaurante Brisas del Mar.

En la caminata intercambió con vecinos que salieron a saludarlo y algunos también a plantearle sus problemas, por aquello —decía una lugareña—, de que «al que le duele, le duele».

Marrero también los escuchó con atención y sensibilidad. Conversando con ellos, señaló que se han ido acumulando muchos problemas y no se podrán resolver de una vez, pero están identificados y con la participación de todos los solucionaremos, enfatizó.

Señaló, sin embargo, que lo que no puede comprenderse es que quienes tienen responsabilidades con la respuesta a los problemas no conversen con las personas que tienen alguna, los visiten en sus casas y les expliquen.

El colofón de la visita a Manzanillo fue un intercambio con los miembros del Consejo de la Administración Municipal. El centro del debate fue la Estrategia de Desarrollo Local, el Plan y el Presupuesto municipal para 2022 y la marcha del cronograma para la transformación de los servicios comunales, entre otros temas.

Marrero comenzó la jornada laboral por el bloque productivo en desarrollo Granma 2, en las cercanías del aeropuerto de Manzanillo, y donde se alistarán varios cientos de hectáreas para el autoabastecimiento municipal. Fotos: Estudios Revolución

A BAYAMO, CON AMOR

Tras una visita al complejo hotelero Club Amigos Marea del Portillo-Farallón del Caribe, en el municipio costero de Pilón, donde evaluó los trabajos de rehabilitación de la instalación Farallón para su reincorporación a la oferta turística de la Mayor de las Antillas, Marrero Cruz llegó a la capital granmense.

Cayendo la tarde se fue para el reparto Jabaquito, donde decenas de personas, ya enteradas de «una visita importante» a la comarca, lo esperaban. Como en toda la jornada, el Primer Ministro atendió al pueblo de forma respetuosa y gentil, y también esclarecedora y optimista.

El joven Carlos Arvey González Arias, delegado de la circunscripción No. 112 del consejo popular Francisco Vicente Aguilera, le explicó las acciones de transformación que se ejecutan en el barrio.

Fue en el recorrido que Marrero hizo por el pequeño complejo de servicios que se inauguró semanas atrás en la localidad y que era una vieja demanda de la población, que a lo largo de los años había generado varias decenas de planteamientos en las asambleas de rendición de cuentas.

Cayendo la noche, el Primer Ministro visitó el local de la Mipyme (micro, pequeña y mediana empresa) privada Sublimagen, donde lo esperaba Aliette Zamora Zamora, líder de un emprendimiento familiar asentado en el centro de la ciudad que se especializa en el diseño, impresión y otras encomiendas del negocio de las promociones.

En el centro histórico de Bayamo, Marrero Cruz también inauguró la nueva sede de la Dirección Provincial de Justicia de Granma, una bella instalación que no solo ya enorgullece a los juristas, sino que será un espacio creativo y funcional para sus trabajadoras y trabajadores,  y para las personas que necesiten acudir al lugar en busca de algún servicio u orientación.

El Jefe del Gobierno de la República concluyó la jornada de trabajo de este jueves, como parte de la visita de Gobierno a Granma y que termina hoy viernes, asistiendo a la sesión extraordinaria de la Asamblea Municipal del Poder Popular de Bayamo, donde se discutió y aprobó el Plan y el Presupuesto del territorio para 2020.

El joven Carlos Arvey González Arias, delegado de la circunscripción No. 112 del consejo popular Francisco Vicente Aguilera, le explicó las acciones de transformación que se ejecutan en el barrio. Foto: Estudios Revolución